Lúa Mar Alvado posa en las instalaciones de Grupo Prensa Pitiusa. | Daniel Espinosa

Lúa Mar Alvado García (Ibiza, 15-08-2003), campeona balear absoluta de lanzamiento de martillo, se ejercitará como miembro del Centro de Tecnificación balear a partir de ahora después de haber sido seleccionada para formar parte de la Fundació per a l’Esport Balear. De esta forma, la atleta pone temporalmente fin a sus entrenamientos en Can Misses con el Club Atletisme Pitiús y continuará formándose en tierras mallorquinas con el sueño de, en el futuro, alcanzar cotas altas como participar en un Europeo o, por qué no, unos Juegos Olímpicos, sus sueños particulares.

La ibicenca afronta este paso «un poco asustada» porque «es una cosa totalmente nueva» para ella. «Al fin y al cabo, nunca te esperas que vaya a llegar esto, aunque sea gracias a los frutos que recoges», comentó. Resultó complicado hacer buenas marcas en la recta final de la temporada dado que las obras en las instalaciones de Can Misses mermaron su preparación para el Campeonato de España sub-20, tal y como ella misma reconoció: «La recta final no fue fácil por todo el tema del campo de fútbol y las obras. No pudimos entrenar justamente unas dos semanas antes del Campeonato de España y tuvimos que buscar soluciones. Influyó porque pasé de entrenar tres horas al día a una hora y media con problemas de tiempo y de todo. Sólo podía lanzar a ciertos horas y eso era difícil para mí».

Su marcha le da algo de pena, algo normal en la primera experiencia lejos de casa y a tan temprana edad: «A pesar de que conozco a toda la gente con la que voy a entrenar en Mallorca, llevo dos años y medio entrenando aquí cada día y te acostumbras a los compañeros. Los echaré de menos y también a Toni Roig». Ahora, su entrenador pasará a ser José Juan Vellibre. «Llevamos unos días hablando y tiene ganas de que me integre», comentó sobre él.

Alvado, que tuvo buenas palabras para su familia, que le ayudó «a superar tanto estrés», tiene claras sus próximas metas: «Quiero el récord absoluto de Baleares, que lo tengo bastante cerca, revalidar mi título de campeona de Baleares y acercarme a las medallas en el próximo Campeonato de España».

La deportista pitiusa, que batió varias veces la mejor marca balear sub-20 esta temporada hasta fijarla en 42,93, cree que es posible superar la barrera de los 50 metros este curso. Sería un paso más para ir aproximándose con el tiempo a su gran sueño: «Como todo atleta, quiero ir a unos Juegos Olímpicos, aunque no sea una meta nada fácil. También me gustaría ir a un Europeo y a los Mundiales, pero las Olimpiadas son la meta máxima a la que cada atleta quiere aspirar».

En este sentido, el gran papel de Marc Tur en Pekín le sirve de motivación: «Sé que no es fácil. Lleva muchos años entrenando. Yo, en comparación con él, no llevo nada, pero todo esfuerzo tiene su recompensa. No pienso en París, pero, a lo mejor, podría mirar a Los Ángeles con mucho esfuerzo».