UD IBIZA: 1

AMOREBIETA: 1

La UD Ibiza se tuvo que conformar con un punto (1-1) contra el Amorebieta en un partido que dominó de principio a fin, pero en el que la falta de puntería le privó de obtener los tres puntos. El equipo vasco apenas se dejó ver por el área, pero el hecho de adelantarse a los dos minutos le permitió centrarse en hacer lo que mejor se le da: defender. Con todo, los celestes reaccionaron en la segunda mitad, nivelaron la contienda y lucharon por su primera victoria en el estadio de Can Misses, que, finalmente, deberá esperar.

[Las mejores imágenes del partido entre la UD Ibiza y el Amorebieta (1-1).]

Koldo Obieta silenció a los más de 3.000 espectadores que se dieron cita en el coliseo unionista cuando varios de ellos aún estaban tomando asiento. El delantero aprovechó una salida en falso del portero Germán para cabecear el balón al fondo de la red. Dos minutos y jarro de agua fría para los de Juan Carlos Carcedo, que realizó más cambios de los habituales en su once inicial, tres en concreto. Javi Lara, Appin y Davo jugaron de inicio en detrimento de Bogusz (concentrado con la selección polaca sub-21), Javi Pérez y Cifu.

Pese al 0-1, los locales no se amilanaron lo más mínimo. Es más, el tanto pareció espolear a una Udé que se puso el mono de trabajo para tratar de nivelar la balanza lo más rápidamente posible. Appin, que disfrutó de su primera titularidad con la elástica celeste, tomó un papel protagonista en estos primeros minutos, dejándose ver incluso en ataque.
Al conjunto pitiuso le estaba faltando el último pase para dañar al contrario. Al cuarto de hora, Castel no vio a Ekain libre de marca en el segundo palo y disparó fuera en el primer gran aviso del cuadro local.

Los zornotzarras esperaban atrás, agazapados en busca de una contra con su marcado 5-3-2. El portero Santamaría no tardó incluso en empezar a perder tiempo ante los pitidos constantes de la grada.

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La Udé combinaba alegremente y se mascaba el empate. De hecho, pudo llegar en el minuto 35, pero Ekain, solo, remató al palo tras un buen pase lateral de Castel, que se coló por la izquierda como Pedro por su casa. Increíble, pero cierto.

La primera mitad se cerró con el segundo y último acercamiento de los visitantes. Obieta, quién si no, chutó desde fuera del área, pero su disparo lo detuvo abajo Germán sin mayores problemas.

La insistencia de los de Carcedo acabó encontrando recompensa en el arranque de la segunda parte. Sergio Castel recogió un rechace cerca del área pequeña tras un disparo previo de Javi Lara y encontró posición de tiro para batir a Santamaría con un chut raso.
La grada de Can Misses estalló de júbilo y empezaba a creer en la victoria. Méritos, desde luego, estaba haciendo el equipo ibicenco.

Los dos equipos comenzaron con su carrusel de cambios, pero lo cierto es que ninguno se realizó con el fin de variar el dibujo táctico. A la UD Ibiza ya le iba bien, porque su problema no era de juego, sino de definición. Por su parte, el cuadro vasco confiaba en su capacidad defensiva. El punto le venía bien y si, encima, cazaba una contra, mejor que mejor.

El debut de Herrera y Nono, que tuvieron pocos minutos, no varió el guion, si bien el ex del Tenerife gustó bastante. Los visitantes incluso estuvieron a punto de llevarse el gato al agua en el tiempo de descuento, cuando Larrazabal se marcó un jugadón individual y, tras dejar a dos rivales atrás, disparó sorprendentemente fuera.

No hubo tiempo para más. El 1-1 se mantuvo inalterable. Los unionistas continúan así invictos tras cuatro jornadas, pero con la deuda pendiente de ganar como local, y los vascos regresaron a casa con un premio que les sabe a gloria a tenor de lo ocurrido en el terreno de juego. Y es que la Udé no ganó un punto, sino que vio cómo se evaporaban dos.