Kevin Appin y Rubén, durante uno de los entrenamientos de esta semana. | UD Ibiza

Conseguir la primera victoria en casa. Esa es la consigna en el vestuario celeste. Las jornadas van pasando y esta resiste. Todavía no es preocupante, pero empieza a haber inquietud y la sensación de que se debería haber sacado algún punto más en Can Misses. En este ambiente, llega a la isla el Burgos, otro recién ascendido, y quizás una víctima propicia para dar el primer zarpazo como local. El duelo se disputará esta tarde a las 16.00 horas, en el que será el partido con mayor afluencia de público, ya que se podrá llenar el 60% del aforo.

Los celestes llegan a la cita como el único equipo invicto de la categoría, pero como el rey del empate. De los seis encuentros disputados, cinco de ellos han acabado con igualdad en el marcador. Un hecho que puede dar una falsa sensación de tranquilidad, cuando lo cierto es que los de Carcedo solo están dos puntos por encima de la zona de descenso. La igualdad en esta categoría es máxima y eso obliga a sumar de tres para llenar el casillero de puntos. La meta son 50 y a base de empates no se alcanzaría. El propio técnico celeste quiso quitar presión a sus jugadores y aseguró que la victoria es cuestión de tiempo y que hay que destacar la buena dinámica que llevan.

Es cierto que se necesita la victoria, pero no es menos cierto que el equipo transmite buenas sensaciones. Se ha enfrentado a varios equipos de renombre y les ha competido de igual a igual. Por ello, Carcedo sigue apostando por lo que funciona. Las variaciones en el once son mínimas y mantiene el esqueleto del curso pasado que está demostrando que también es válido para el fútbol profesional. De todos modos, no se descarta que el técnico pueda hacer alguna variación esta tarde para dar más mordiente ofensiva o empezar a apostar por alguno de los refuerzos llamados a dar ese saltito de calidad.

Quien podría regresar al once es el máximo goleador celeste. En el último encuentro había dejado la duda de Castel que se había retirado con molestias en el cuádriceps izquierdo, aunque este viernes Carcedo señaló en rueda de prensa que el jugador está disponible. Eso sí, el técnico, como es habitual, tampoco dio ninguna pista sobre la posible alineación.

Solidez defensiva

En frente estará un Burgos que encadena tres partidos sin perder, pero que no conoce la victoria lejos de su feudo. De hecho, solo ha ganado un partido en este estreno liguero, pero lo hizo en su mejor día y dando el aviso de que puede ser un rival muy peligroso. Lo de Julián Calero pasaron por encima del Valladolid, uno de los mejores equipos de la categoría, en un derbi que acabó con un resultado de 3-0.

Esa victoria está acompañada de tres empates y dos derrotas que hacen que este recién ascendido navegue por la zona baja de la tabla con seis puntos, los mismos que marcan la zona de descenso. Los castellanos vienen de empatar sin goles contra Las Palmas en su casa. Su técnico, Julián Calero, está apostando por un 4-4-2 que se caracteriza por una importante solidez defensiva, solo cuatro goles encajados, y el juego directo.

El Burgos es un equipo hecho a bajo coste, que mantiene gran parte del bloque del curso pasado que consiguió el ascenso, pero que cuenta con jugadores con gran experiencia en la categoría. En la zona de arriba cuentan con el talento de los ex del Mallorca, Álex Alegría y Pablo Valcarce, Ernesto que viene del Alcorcón y dos jugadores que fueron clave en el ascenso como el veterano Saúl Berjón y el capitán Juanma García que ya suma tres goles. Todos ellos disponibles para el partido de esta tarde. Los visitantes solo cuentan con la baja del lateral zurdo Fran García que está lesionado.

El entrenador de los burgaleses señaló en la previa del encuentro que espera alargar el buen momento de su equipo y destacó la importancia de adelantarse en el marcador ante una Udé que solo ha estado por detrás en el marcado en una ocasión, precisamente contra el Amorebieta.

Este será el segundo duelo entre recién ascendidos para los hombres de Carcedo tras empatar a 1-1 contra el mencionado conjunto vasco en la cuarta jornada de liga. En aquel duelo, los pitiusos se vieron por detrás en el marcador a las primeras de cambio y, aunque fueron muy superiores en todo el encuentro, no fueron capaces de pasar del empate.

Por su parte, el Burgos también ha jugado contra el Amorebieta en un partido en el que consiguieron empatar en el último suspiro (2-2) pese a