Los jugadores de la UD Ibiza, durante uno de los entrenamientos de esta semana.

Sin presión, con los deberes hechos y con muchas ganas de soñar. Así llegó la UD Ibiza a El Bierzo para medirse este domingo por la tarde (16.00 horas) a la Ponferradina. Los celestes están realizando una temporada sobresaliente y se han ganado el derecho a pelear por cosas mayores. A pelear por unos puestos de playoff que cuando empezó a rodar el balón en el mes de agosto eran inimaginables.

Los de Paco Jémez llegan con mucha ilusión, pero también con muchas bajas. Los pitiusos no podrán contar en El Toralín con dos de sus máximos goleadores. Castel, con una fascitis plantar, se perderá su segunda jornada consecutiva. Tampoco estará Goldar que no se ha recuperado de los problemas musculares que le obligaron a retirarse antes de tiempo la semana pasada.

La lista de ausencias continúa con Álex Gálvez, Álvaro Jiménez y Javi Pérez, jugadores que tampoco estuvieron en Can Misses en la victoria contra el Huesca.

Así pues, todo hace indicar que en el centro de la defensa estarán Rubén y Juan Ibiza, ya que son los únicos centrales específicos con los que cuenta Jémez. La principal duda estará en el lateral derecho, donde podría volver a apostar por Fran Grima que cuajó un gran encuentro la semana pasada.

Noticias relacionadas

En el centro del campo se espera la irrupción de Kevin Appin. El centrocampista francés se ha ganado a pulso más minutos con sus buenas intervenciones desde el banquillo y ante un equipo tan físico como la Ponferradina puede ser un factor determinante. El propio Jémez deslizó en rueda de prensa que podría hacer algún cambio para buscar más músculo en la medular.

Para el ataque, sin el mencionado Castel, Herrera y Guerrero volverán a ser los protagonistas y habrá que esperar a ver si es Davo o Miki Villar quién les acompañe. También esperan su oportunidad Nono y Raúl Sánchez que todavía no ha debutado.

Un rival peligroso

Todo lo contrario ocurre en la Ponferradina, que aunque no podrá contar Agus Medina, recupera a Pascanu, Copete y Erik Morán. Los de El Bierzo son sin duda la sorpresa de la temporada. Tras varios años en el fútbol de plata, este han dado un salto de calidad y llevan desde el inicio de curso en la zona alta de la tabla. En concreto, marchan en quinta posición y hay siete puntos entre estos y la Udé en la clasificación.

Además, se da la circunstancia de que será la tercera vez que se vean las caras esta temporada, ya que a parte del partido de la primera vuelta, también se enfrentaron en Copa del Rey. En ambos casos los del Bolo se impusieron al equipo que por aquel entonces dirigía Carcedo.

Sin duda habrá que tener en cuenta el poderío ofensivo de los bercianos que tienen a Yuri y a Sergi Enrich como principales armas, sin olvidarse tampoco de un Edu Espiau que está en un magnífico estado de forma. Se trata de una plantilla profunda y compensada que destaca por su poderío físico. De hecho son un equipo que ha sacado muchos puntos en los tramos finales de los encuentros y que consigue hacer mucho daño a sus rivales pese a no tener el control del encuentro.