Coke Andújar y Mateusz Bogusz han sido presentados este jueves como jugadores de la UD Ibiza. El primero llega procedente del Levante, mientras que el segundo regresa a la que fue su casa el curso pasado, de nuevo en forma de cesión por parte del Leeds.

El polaco confesó que espera estar disponible para jugar «en octubre». El internacional reconoció que esta etapa que le ha tocado vivir lesionado fue «dura», pero que ahora es «feliz». Sobre la competencia que tiene en su lugar y si se ve adaptándose a otro puesto, comentó: «No sé dónde quiere que juegue el míster. Estoy feliz por estar aquí. No importante dónde juegue: izquierda, centro o derecha. Lo importante es jugar».

Coke comentó que viene «con muchísimas ganas» y ve «un proyecto muy interesante que está en constante crecimiento». En cuanto al inicio del curso, con tres derrotas y un empate, apunto que es cierto que «la necesidad de esa primera victoria sobrevuela en el ambiente, pero hay que crecer, ser competitivos y más contundentes en las áreas».

Trayectorias

Coke, de 35 años, firma por un temporada y con él, el conjunto celeste se hace con un líder para el vestuario. Se trata de un futbolista con una enorme experiencia en el fútbol profesional. Defendió los colores del Rayo Vallecano, Sevilla, Schalke 04 y Levante, superando los 200 partidos en Primera División, tiene otro centenar en Segunda y más de una treintena en competiciones europeas. Precisamente con el Sevilla se proclamó campeón de la Europa League en tres ocasiones.

Por su parte, Bogusz, de 21 años e internacional por Polonia en categorías inferiores, regresa a una isla en la que mostró su mejor juego. Sus números hablan por sí solos: cuatro goles y siete asistencias en los 22 partidos que disputó antes de caer gravemente lesionado en La Rosaleda en el comienzo de la segunda vuelta.