El Class Bàsquet Sant Antoni tras vencer al Hestia Menorca hace unos días. | Class Bàsquet Sant Antoni

El Class Bàsquet Sant Antoni pasa, probablemente, por su mejor momento en la temporada 2022-23. Los isleños, que acumulan cuatro victorias consecutivas, son el equipo más en forma de la conferencia y no quieren bajarse de esta dinámica positiva. Después de derrotar con autoridad al Benicarló y al Hestia Menorca, los de Portmany buscan un nuevo éxito este domingo. Visitan la pista del Fibwi Palma (polideportivo de Son Moix, 18.00 horas) en su segundo derbi balear consecutivo.

El bloque sanantoniense está segundo en la clasificación, por detrás de un Hestia que tiene un triunfo más. Los ibicencos miran de reojo al liderato, que podrían alcanzar si se dieran los resultados. Para ello deben ganar al Fibwi Palma y que el Hestia tropiece en la pista del Safir Fruits Alginet. Pero antes deben pensar en hacer su trabajo. Y, este domingo, el Sant Antoni se enfrenta a un rival que está situado séptimo con ocho victorias, tres menos que los ibicencos.

«Creo que el equipo está en un buen momento de confianza en el juego y se encuentra muy cómodo en la idea hemos establecido. Los resultados están saliendo. El partido ante el Fibwi Palma es muy complicado porque es un equipo bastante diferente al que jugamos en su día. Han evolucionado muy bien y son el mejor ataque de la Liga, pero también son la peor defensa y es aquí donde tenemos que sacar provecho», explicó Carles Flores, entrenador del Sant Antoni.

El preparador catalán cree que «con paciencia y sin prisas, el equipo se está mostrando seguro y convincente». «Tenemos que intentar seguir sumando», apuntó el míster, que continúa sin poder contar con el lesionado Magnus Mollgaard.

En caso de ganar, el Class Bàsquet Sant Antoni llegaría a las 12 victorias ya, lo que es sinónimo de una permanencia prácticamente asegurada. El camino estaría despejado para ser ambiciosos y pensar a lo grande de cara a un hipotético playoff de ascenso a LEB Oro.

El Class Sant Antoni no estará solo en Palma. Alrededor de un centenar de aficionados lo acompañará en las gradas de Son Moix. El club sigue creciendo en el apartado social y cada vez son más los seguidores que se suman al proyecto de los de Portmany.