Una imagen de un entrenamiento de la UD Ibiza de esta semana. | UD Ibiza

Ganar o ganar. No le queda otra a la UD Ibiza si quiere que la llama de la esperanza por conseguir la salvación no se apague. El equipo celeste recibe esta noche, a partir de las 21.00 horas en el Palladium Can Misses, a la Ponferradina, rival que se encuentra también en la zona de descenso pero empatado con el primero en salvarse, el Racing de Santander. Los pupilos de Lucas Alcaraz necesitan los tres puntos como el comer para tratar de reengancharse a la pelea por una salvación que cada vez está más complicada.

Actualmente, los unionistas están a nueve puntos de los de bercianos. Ganar significaría colocarse a seis de ellos y de un Racing que cerrará la jornada manaña contra el Leganés en El Sardinero. Por contra, una derrota significaría alejarse en 12 puntos de los puestos de permanencia, una distancia demasiado amplia.

Tomando como base que la salvación suele rondar por los 47 o 48 puntos, la Udé debe sacar adelante unos 30 de los 48 restantes. Son números más bien propios de un aspirante al ascenso, por lo que la empresa se presenta bastante difícil. De todas formas, lo que está claro es que hoy debe lograr el triunfo para poder seguir haciendo las cuentas de La Lechera.

Para este encuentro, Lucas Alcaraz recupera a Kevin Appin y Cristian Herrera. El canario, que se perdió el duelo anterior por un proceso vírico, regresará con total seguridad al once titular. No cabe duda de que el máximo goleador del equipo celeste será de la partida. En principio, Appin también debería volver a la alineación inicial, si bien el buen papel de Javi Serrano en su debut la semana pasada plantea bastantes dudas sobre quiénes saldrán de inicio en la medular. La única baja que presenta el cuadro ibicenco es la del central Marcos Mauro.

La SD Ponferradina quiere unir a la solidez defensiva adquirida tras la llegada al banquillo de David Gallego, principalmente en las últimas jornadas, una mayor producción ofensiva que le
permita sumar la victoria en el terreno del colista, con el que nunca ha perdido, con tres victorias y un empate.

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Los bercianos cierran frente a los baleares la racha de enfrentamientos ante rivales directos que se saldaron, en los dos últimos compromisos, con sendos empates, a domicilio en Zaragoza y en terreno propio frente al Real Racing de Santander.

Una victoria e incluso un empate en Can Misses le permitiría a la Deportiva salir de las cuatro últimas posiciones a expensas de lo que mañana pudiera hacer en El Sardinero el conjunto santanderino ante el CD Leganés.

Para la cita de hoy, el técnico deportivista cuenta con las bajas de José María Amo y José Naranjo, ambas por sanción, y el centrocampista Erik Morán, en este caso por una fisura en las costillas. De esta forma, Gallego tan sólo tiene la duda de quién será el acompañante en el centro de la defensa del rumano Alex Pascanu, bien Adrián Diéguez, si retrasara su posición, habitual últimamente en el doble pivote, lo que supondría incluir en la medular a Agus Medina, o dar la primera titularidad al internacional marroquí Sofiane Chakla.

Para la banda, el sustituto más claro parece ser el andaluz Hugo Vallejo, una vez recuperado de las molestias que le impidieron actuar en los dos últimos encuentros.

Con este panorama se presenta un duelo clave para las aspiraciones de ambos equipos, especialmente para la Udé. Una derrota celeste significaría medio billete hacia Primera RFEF. La victoria, en cambio, permitiría a los unionistas soñar con el milagro.