Los cinco expeñistas, Nil, Rubén, Aparicio, Salinas y Moro, posan en el Municipal de Sant Rafel.

Que el San Rafael no es el club rico de la Isla no lo va a descubrir nadie. Por eso, parafraseando a Mario Ormaechea en su etapa ‘rafelera’, «no ficha lo que quiere, sino lo que puede». La Peña Deportiva dejó escapar a jugadores como Piquero, Vicent o Adrián Ramos para firmar otros de la península, por lo que la entidad ‘blue’ se hizo con ellos. Eran los descartes de otros, pero su rendimiento no pudo ser mejor. El problema es ahora mayor incluso, porque los peñistas no han ido a pescar al territorio peninsular, sino a Sant Rafel. Los mejores han hecho las maletas a Santa Eulària y el club ha decidido continuar con su filosofía: firmar sus descartes. Carlos Moro, Manolo Aparicio, Rubén Martínez, Manuel Expósitos Salinas y Nil Paniello –éste ha abandonado de la Peña por voluntad propia– esperan correr la misma suerte que sus excompañeros y brillar con luz propia en el ‘San Rafi’.

A la hora de describir la etapa que afrontan ahora, todos coincidieron en pronunciar la palabra «ilusión». Algunos, porque esperan tener más minutos, como Salinas o Nil. «El año pasado tuve problemas con las lesiones y tengo ganas de hacer bien la pretemporada y aportar todo lo que pueda al equipo», indicó el primero. «Lo que necesito es jugar y aquí tengo la ilusión de poder hacerlo», comentó el segundo. Eso sí, tanto a Moro como a Aparicio se les ha hecho algo extraño el primer día de trabajo en Sant Rafel. «Ver todo distinto, con gente nueva y ropa azul en vez de blanca se te hace un poco extraño, pero estoy muy contento», afirmó el portero. «En Sant Rafel se abre otra puerta y le deseo lo mejor a la Peña», espetó el lateral.

Ninguno cree que, a pesar de que la Peña haya confeccionado mejor plantilla, la llegada al ‘San Rafi’ suponga un paso atrás. «Mi manera de trabajar será la misma aunque estuviera en Regional y hay que mirar hacia delante porque todo lo que viene es para bien», indicó el guardameta. Salinas recordó en este sentido que «la categoría es la misma». Aparicio agregó que «el dinero tampoco te asegura estar arriba, como ya se vio con la Peña el año pasado». Nil lo tiene claro: «Para mí es un buen paso porque necesito minutos». Rubén se limitó a decir que «simplemente se cambia de club, acaba un ciclo y empieza otro».

Todos esperan rendir al máximo, pero no para demostrar nada a la Peña. «Si puedo hacerlo mejor aquí, perfecto para mí y para el San Rafael. Por unas circunstancias u otras no pertenezco a la Peña y no tengo que nada que demostrar ni reivindicarme ante nadie», señaló el cancerbero. Rubén fue claro: «Lo que quiero es demostrar que el San Rafael acierta al ficharme, no que la Peña se ha equivocado dejándome ir». En la misma línea se pronunció Salinas, que no tiene ganas de «revancha». Aparicio sólo tiene palabras de agradecimiento hacia la Peña: «Lo di todo allí durante siete años. Nunca tuve ningún problema. Me porté superbien y ellos también». Por su parte, Nil sólo matizó que «sí que hay ganas de demostrar que la gente de la Isla puede jugar en esta categoría».

¿Se repetirá la historia?

Sobre el hecho de que aquel jugador que cambia la Peña por el ‘San Rafi’ acaba triunfando, Moro dijo: «Algo tiene que haber aquí para que vengan expeñistas como Piquero y hagan tan buena temporada». Salinas subrayó que «ya se verá si se repite eso a lo largo del año. Somos un equipo con gente muy joven y tendremos que luchar en un año difícil». Aparicio, por su parte, sueña con que «vuelva a suceder esto». Toca esperar, pero todos ellos ya han iniciado el camino hacia el triunfo.