El pívot de la selección española Pau Gasol (c), durante el partido de la cuarta jornada de la fase de grupos de la Copa del Mundo de Baloncesto FIBA 2014 ante Francia. | Miguel

España España 88

Francia Francia 64

Mundial FIBA Grupo A | Jornada 4 | 03/09/2014 22:00 | Fin

España 86 - 62 Francia

España (22+22+21+23): Pau Gasol (15), Rudy (8), Navarro (14), Rubio (4) y Marc Gasol (17) -equipo inicial-, Rodríguez (2), Calderón (2), Reyes (2), Claver (2), Llull (10), Ibaka (10) y Abrines (2).

Francia (19+15+16+14): Heurtel (6), Batum (11), Lauvergne (8), Diaw (3) y Gelabale (4) -equipo inicial-, Diot (11), Kahudi, Jackson (5), Fournier (9), Pietrus (3), Tillie y Gobert (4).

Árbitros: Guerrino Cerebuch (ITA), Jorge Vázquez (PUR) y Olegs Latisevs (LAT). Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada del grupo A de la Copa del Mundo, disputado en el Palacio Municipal de Deportes de Granada, ante unos 8810 espectadores. Lleno

La selección española venció por 88-64 a Francia y se garantiza ser primera del grupo A de cara a los cruces de octavos de final, del campeonato del Mundo de baloncesto, que España disputará en Madrid el próximo sábado.

Los enfrentamientos entre España y Francia se han convertido, en los últimos años, en algo más que un partido, y eso se notó de inmediato. Los dos se temen y se respetan, buscando la victoria con más ahínco si cabe.

La selección española salió con el cuchillo entre los dientes y en la primera posesión francesa hizo, con una gran defensa, que agotaran los 24 segundos de posesión sin poder lanzar a canasta. Toda una declaración de intenciones.

Diaw, con un triple, adelantó fugazmente a Francia en el marcador, 2-3, pero el equipo español encadenó un parcial de 9-0 en menos de tres minutos (11-3 min.3,15) gracias a su intensidad en defensa y a su acierto en ataque.

En el minuto 7 (15-9), España acumulaba 3 robos de balón, 2 tapones y 5 asistencias. Un gran ejemplo de su actitud en la pista. Pero Francia no se dejó intimidar. Aunque sin pisar apenas la zona en ataque, la selección gala no perdió la cara al partido y, al contrario llegó a igualar el marcador a 19 a falta de 40 segundos.

Sólo una genialidad de Juan Carlos Navarro, que se inventó un triple en una jugada de banda con 7 décimas de segundo de tiempo, permitió a la selección española dominar al término del primer cuarto, 22-19.

En los primeros segundos del segundo periodo, Navarro repitió suerte y poco después fue Marc Gasol el que anotó otro triple. En menos de un minuto, contando el del primer cuarto, la selección había anotado tres triples sin fallo, relanzando su ventaja a 28-19.

Vincent Collet, entrenador francés, siguió con sus rotaciones, con Nicolas Batum casi omnipresente todo el tiempo buscando no bajar el ritmo.

Juan Antonio Orenga, seleccionador español, además de mover el banco comenzó a explorar la defensa en zona, con buenos resultados puntuales. Al descanso, España consiguió una ventaja de diez puntos, 44-34, con Pau Gasol autor de 12 puntos.

En la reanudación una técnica a Marc Gasol por protestar sirvió de revulsivo a una defensa de anticipación que redujo la efectividad gala y que aumentó la ventaja a 52-36 (min.22), obligando a Collet a pedir tiempo muerto para frenar el vendaval español.

Francia consiguió frenar la sangría y el partido se estabilizó con ventajas superiores de los diez puntos para los españoles, 56-42 (min.26). El partido fue duro, rápido, intenso y deportivo y ninguno de los dos equipos reservó nada. Ganar al eterno rival merece la pena cualquier esfuerzo.

Al final del tercer cuarto, 63-50 y Francia que comenzaba a perder la paciencia y desesperarse por que todos sus esfuerzos no servían para casi nada, máxime si en el primer minuto del último cuarto la ventaja asciende a 67-50.

Otro arreón con tapón de Marc, triple de Llull al límite de la posesión y otra canasta de Navarro pusieron un +18 en el marcador, 72-54 (min.32.40) y la victoria en clara franquicia.

Collet arrojó la toalla. Sentó a Batúm y Diaw, sus mejores bazas, e intentó reservar fuerzas. España se mostró inexpugnable, en ataque y en defensa, y el técnico galo prefirió dejarlo así, aunque le costara una derrota por más de veinte puntos, 88-64. Algo que siempre escuece.

España será primera del grupo A independientemente de lo que ocurra en el partido que cierra la primera fase ante Serbia.