Los jugadores de la selección española celebran uno de los goles ante Hungria. | Carmelo Rubio

España 5-2 Hungría

España: Sedano; Rivillos, Pola, Lin y Raúl Campos -cinco inicial-, Juanjo, Ortiz, José Ruiz, Bebe, Andresito, Alex y Miguelín.

Hungría: Tóth; Klacsák, Horváth, Németh y Rábl -cinco inicial-, David, Hosszú, Szeghy y Dróth.

Goles: 1-0, min. 7: Németh, en propia meta; 2-0, min. 14: Bebe; 3-0, min. 20: Miguelín; 3-1, min. 23: Dróth; 4-1, min. 28: Miguelín; 5-1, min. 35: Andresito; 5-2, min. 37: Dróth.

Árbitro: Lukás Pesko (Eslovaquia). Mostró cartulina amarilla a Rábl (min. 12) por parte de Hungría y a Lin (min. 23) por parte de España.

Incidencias: partido del grupo B de la primera fase del Europeo de Serbia disputado en el Arena Belgrado ante unos 5.000 espectadores.

La selección española de fútbol sala debutó este martes en el Europeo de Serbia con una victoria por 5-2 ante la de Hungría y comenzó con buen pie el camino para recuperar una corona que perdió en 2014 en Bélgica y que ahora ostenta Italia.

España ha ganado seis de los nueve torneos que se han disputado. Además, también suma dos segundos puestos y un tercero. Siempre ha estado arriba, en casi todas las finales y, en Serbia, no quiere fallar.

El equipo español necesitaba comenzar con buen pie el Europeo. Hungría, una selección rocosa, a priori no debía representar un problema para los hombres de José Venancio López, que, sin embargo, pasaron algún apuro a lo largo de los cuarenta minutos.

Los primeros sobresaltos llegaron en el primer tramo del choque, cuando Hungría, hasta el primer gol de España, dominó el partido con alguna ocasión y, sobre todo, con mucho control de balón y acoso cerca de la portería defendida por Paco Sedano, que después sería fundamental.

Sin embargo, un pequeño golpe de suerte con el gol en propia meta de Németh comenzó a devolver la lógica a la pista del Arena Belgrado. Con el 1-0 en el marcador, España perdió los primeros nervios típicos de un estreno y comenzó a dominar el duelo.

Hungría, que no volvería a despertar hasta la segunda parte, no pudo frenar a los españoles, que con un gol de Bebe y con otro zurdazo de Miguelín que acabó en la red de la portería magiar, se marcharon al descanso con un 3-0 claro en el marcador.

Entonces, España reculó de nuevo. Hungría, esta vez sí, se aprovechó de la situación y logró su primer tanto por medio de Droth, que marcó de falta gracias a la ayuda de un defensa español, que inclinó un poco su cuerpo y el balón superó la barrera.

El 4-1, obra también de Miguelín, y un tiro de Raúl Campos a un poste, precedieron a un nuevo período de dominio de Hungría, que chocó con las paradas de Paco Sedano. Especialmente meritorias fueron tres: una en el minuto 25 a Szeghy, la segunda a Hosszú en el 27 y la tercera a Davis en el 28.

El muro casi insalvable de Sedano desesperó a Hungría, que vio cómo Andresito, en el minuto 35, culminó un nuevo tramo hegemónico del equipo de José Venancio López. El segundo tanto de Dróth, testimonial y casi al final, no cambió nada y España comenzó el Europeo con buen pie.