El piloto de MotoGP Jorge Lorenzo, de Movistar Yamaha, durante los primeros entrenamientos de pretemporada de MotoGP en el circuito de Sepang. | Efe

El mallorquín Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1), es la primera referencia del Gran Premio de Catar de MotoGP, prueba inaugural del campeonato del mundo de motociclismo que este fin de semana se disputa en el circuito de Losail.

Lorenzo, triple campeón del mundo de MotoGP, marcó un mejor tiempo de 1:55.440 en su último giro, por delante de su propio compañero de equipo el italiano Valentino Rossi y de su compatriota Andrea Iannone (Ducati Desmosedici GP16), tercero.

Héctor Barberá (Ducati Desmosedici GP14.2) fue el cuarto en discordia, por delante del también español Maverick Viñales y su Suzuki GSX-RR.

Desde los primeros minutos de entrenamientos se pudo «palpar» en el ambiente el ansia que todos los pilotos tenían por comenzar a rodar en el trazado de Losail, en el que la jornada previa la lluvia limpió mucho el asfalto y lo dejó en muy buenas condiciones.

Uno de los primeros aspectos importantes que se pudo apreciar en pista en la inclusión de las «alas» en el carenado de muchas motos y no sólo de las Ducati, pues aunque su uso se ha generalizado entre los representantes de Borgo Panigale, también se pudieron ver sobre los «plásticos» de la Yamaha del campeón del mundo Jorge Lorenzo o en las Repsol Honda de Marc Márquez y Dani Pedrosa.

Las primeras vueltas fueron una constante alternancia de pilotos al frente de la tabla de tiempos hasta que en el sexto giro se encaramó en lo más alto de la clasificación el vigente campeón del mundo, Jorge Lorenzo, quien ostenta el registro más rápido de la categoría con 1:53.927 desde 2008, si bien su primer mejor tiempo se quedó en 1:55.693, por entonces el único que rompió la barrera del minuto y 56 segundos, con Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V), segundo pero a más de seis décimas de segundo.

Tras él las diferencias se fueron reduciendo para irse acercando al campeón del mundo hasta las 43 milésimas de segundo a las que se quedó el italiano Andrea Iannone (Ducati Desmosedici GP16), si bien aún restaba por disputarse veinte minutos de entrenamiento libre.

No fue hasta los diez minutos finales cuando verdaderamente se produjeron cambios significativos, el primero de ellos protagonizado por Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) que se colocó tercero a poco más de una décima de su compañero de equipo, mientras que Marc Márquez parecía estancado en su registro de la quinta vuelta y Maverick Viñales (Suzuki GSX-RR), protagonista de la pretemporada, no pasaba del décimo puesto.

Pero en los últimos instantes de los entrenamientos todo cambió, salvo el líder de la categoría.

Lorenzo se mantuvo al frente de la tabla de tiempos con poco más de dos décimas de segundo de ventaja sobre Rossi, quien consiguió su mejor tiempo tras el rebufo de la Suzuki de Maverick Viñales, como Héctor Barberá lo hizo detrás de la Yamaha del italiano.

La sexta plaza fue para otro español, Pol Espargaró (Yamaha YZR M 1), por delante de los dos pilotos oficiales de Repsol Honda, Dani Pedrosa y Marc Márquez, séptimo y octavo respectivamente, que no parecen tener todavía «las cosas» muy claras y a mitad del entrenamiento cambiaron los carenados de sus motos para instalar unos con los tan «cacareados» alerones aerodinámicos.

Más atrás y lejos de donde él mismo espera estar se encuentra Aleix Espargaró, quien no pudo pasar de la decimosexta plaza al manillar de la Suzuki GSX-RR, justo por delante de Álvaro Bautista y la nueva Aprilia RS-GP.

Bautista consiguió un muy buen rendimiento sobre una moto con la que apenas ha podido hacer 200 kilómetros durante la pretemporada, pues la nueva mecánica del fabricante de Noale no se ha puesto en pista hasta los últimos entrenamientos de Losail, hace un par de semanas, y aún así acabó a poco más de segundo y medio de Lorenzo.