Carlos Alcaraz ha destapado el secreto que le ha llevado a ganar su primer título de Wimbledon en 2023 y defenderlo el año siguiente: la noche ibicenca.
En el nuevo documental de Netflix: «Carlos Alcaraz: A mi manera», el tenista describe cómo desoyó los consejos de su equipo y vino a desmelenarse a Ibiza.
«Tenía un amigo que tenía un par de días libres y tenía planeado irse a Ibiza con unos amigos», reveló el tetracampeón del Grand Slam.
«Acabé yendo, ellos sabían lo que iba a hacer en la isla. En Ibiza, no te voy a mentir, se trata más que nada de salir de fiesta. Fui básicamente a ‘reventar’, no sé si es la mejor manera de expresarlo pero fui allí para salir de fiesta».
Puede ser que no sea la preparación convencional para Wimbledon, y su agente Albert Molina se lo desaconsejó, pero Alcaraz confesó que necesitaba desahogarse después de perder contra Novak Djokovic en las semifinales del Open francés de 2023 en las que sufrió debido a unos calambres.
El tónico ibicenco funcionó de maravilla, ya que apenas unas semanas después, con veinte años de edad, derrotó al serbio en la final de Wimbledon.
«Traté de explicarle que quizás no era la mejor idea irse a Ibiza de vacaciones tres o cuatro días cuando tenía el torneo de Queen’s la semana siguiente y luego Wimbledon», dijo Molina.
Alcaraz repitió este truco en 2024 y volvió a Ibiza de vacaciones justo antes del comienzo de la temporada de pista de hierba al tiempo que su preparador físico Juanjo Moreno lo acusaba de estar actuando con egoísmo.
En el documental su entrenador Juan Carlos Ferrero incluso llega a cuestionar si Alcaraz tiene la dedicación necesaria para emular a Djokovic y Nadal.
«Él tiene otra manera de entender el trabajo y el sacrificio», afirmó Ferrero, comparándolo con Djokovic. «Es tan diferente que me hace cuestionarme si realmente puede ser el mejor de la historia».
Pero Alcaraz no tiene remordimientos.
«Siempre quieren protegerme, pero me estoy haciendo mayor, estoy empezando a tomar mis propias decisiones y eso es lo que quiero», comentó. «No me cuido demasiado, paso muchos días disfrutando de la vida. Quizás más de lo que debería. Pero quiero hacerlo a mi manera».
Alcaraz, que cumplirá 22 años el mes que viene, es el número dos esta semana en el torneo Masters de Madrid.
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Su secreto es leer el libro del pinto austriaco y salir a comerse la cancha.