Barack Obama, atendiendo las explicaciones en una visita a la Hermandad Internacional de Electricistas, en Maryland. | Mark Wilson / POOL

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció ayer la construcción de la primera planta de energía nuclear estadounidense en treinta años y que se levantará en el condado de Burke, en Georgia.
En un acto en Maryland, Obama, que quiere convertir las energías alternativas en uno de los ejes de la recuperación económica tras la crisis en su país, aseguró que la nueva planta permitirá crear 800 puestos de trabajo permanentes y miles en el sector de la construcción durante varios años.
Para financiar la construcción de la planta, el Gobierno ha anunciado cerca de 8.000 millones de dólares (más de 6.000 millones de euros) en garantías de préstamos.
«Esto es sólo el principio. Mi presupuesto propone triplicar las garantías crediticias que aportamos para ayudar a financiar instalaciones nucleares seguras y limpias», dijo Obama.
Nuevo impulso
El presidente estadounidense defendió la decisión de dar un nuevo impulso a la energía nuclear al asegurar que los competidores de su país «corren a crear empleos y liderar sectores de la energía en crecimiento». «La energía nuclear no es ninguna excepción», agregó.
Las empresas habían declinado invertir en la construcción de nuevas plantas nucleares desde principios de los años 80 debido al aumento de los costes, las protestas de los grupos defensores del medio ambiente y cuestiones de seguridad.
«En un asunto que afecta a nuestra economía, nuestra seguridad y el futuro de nuestro planeta, no podemos seguir inmersos en los mismos debates rancios entre la derecha y la izquierda, entre los empresarios y los defensores del medio ambiente», sostuvo Obama.
La propuesta de presupuesto que el presidente planteó al Congreso prevé 54.500 millones de dólares en garantías crediticias, de las que 8.300 se destinarán a la construcción de la planta en Georgia.
«Invertir en energía nuclear sigue siendo un paso necesario», destacó Obama, que recordó que, en la actualidad, China construye 21 reactores nucleares, India cinco y Corea del Sur seis.
Obama ha pedido al Congreso una ley sobre medioambiente que incluya un plan para impulsar la construcción de centrales nucleares.