La Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca, PIMEM, ha pedido a la Conselleria de Turismo y Deportes que regule el régimen hotelero del todo incluido en el reglamento que desarrolla la Ley de Turismo de Balears y no el alquiler entre particulares que ya está incluido en otra ley.

En las alegaciones presentadas este lunes, la patronal manifiesta que no considera suficiente crear un registro diferenciado del todo incluido y reclama que se regule esta modalidad «cuando se está constatando el daño que este tipo de turismo provoca no sólo en la oferta complementaria, sino también en la propia Mallorca como marca turística», ha informado PIMEM en un comunicado.

La patronal pide que los establecimientos turísticos que opten por este régimen paguen el máximo de gravamen en todos los actuales tributos autonómicos y municipales y que se concreten por ley «las especiales condiciones y servicios que deberán comprometerse a ofrecer los establecimientos» que opten por este régimen integral.

PIMEM considera que para poder ofrecer todo incluido debe establecerse «un baremo entre los factores de tipo de establecimiento, categoría, número de habitaciones, ratio de ocupación, número de trabajadores que presten servicio y categoría o cualificación de los mismos». La patronal plantea que dicho «baremo de mínimos» sea consensuado en el seno de la Mesa de Turismo.

Sobre el alquiler turístico, PIMEM sostiene en sus alegaciones que el alquiler residencial no debe estar regulado en una norma turística «siempre que se realice entre particulares, ni aunque se trate de un alquiler por un periodo breve de tiempo».

«Para regular esta figura ya existe la Ley de Arrendamientos Urbanos, con un apartado de alquiler de temporada», afirma.

PIMEM considera un contrasentido limitar esta opción a inmuebles unifamiliares aislados construidos antes de 1960 y rechaza la pretensión de que se deba contar con el visto bueno expreso de la comunidad de vecinos.

«No es conveniente crear nuevas limitaciones a una actividad cuya realidad constatada a través de múltiples estudios ya refleja lo positivo que resulta para toda la oferta complementaria», afirma PIMEM, para quien el alquiler de segunda residencia supone un auge dinamizador y desestacionalizador.

También plantea alegaciones al marco competencial del anteproyecto de reglamento y señala que resulta confuso en lo que respecta a los consells y el Govern. PIMEM afirma que «deben respetarse escrupulosamente las competencias transferidas a los distintos consells, evitando costosas duplicidades».

En cuanto a la regulación y clasificación de establecimientos turísticos, PIMEM propone que, «siguiendo el sistema de categorías profesionales establecido en el convenio colectivo de hostelería, se establezca un sistema de valoración en función de la calificación profesional de los trabajadores con que cuenta el establecimiento».

Por último, PIMEM pide en sus alegaciones añadir el requisito de que la totalidad de la flota de vehículos de las empresas de alquiler estén matriculados en un municipio de las Islas Baleares, y que estas empresas deban disponer de espacio propio que permita el aparcamiento de su flota, de manera que en la vía pública se permita exclusivamente el aparcamiento de aquellos que estén alquilados.