Martí Sansaloni, en una imagen de archivo. | Joan Torres

El Consell de Govern ha aprobado hoy un decreto ley de modificación de la ordenación farmacéutica que supondrá la convocatoria antes del final de la legislatura del mayor concurso de adjudicación de nuevas oficinas de farmacia desde 1998.

El conseller de Salud, Martí Sansaloni, ha explicado que la nueva regulación restringe los criterios demográficos de la ley vigente desde hace 16 años, que «sobrestimaban en 80.000 personas» la población estable y flotante del archipiélago.

Esto supondrá que se revisará a la baja el número de 50 nuevas oficinas de farmacia autorizadas y pendientes de adjudicación en la actualidad, aunque Sansaloni ha subrayado que la nueva regulación obligará a sacar a concurso al menos un 80 % de la cantidad de boticas que se autoricen con los nuevos criterios.

El presidente del Govern, José Ramón Bauzá, titular de un despacho de farmacia en Marratxí, y el propio conseller de Salut, también farmacéutico, se han ausentado de la reunión cuando el Consell de Govern ha votado el decreto ley.

Aunque ha evitado en reiteradas ocasiones adelantar cuántas farmacias saldrán a concurso con el argumento de que lo tendrán que determinar los técnicos del departamento competente, ha subrayado que será la mayor adjudicación desde que se aprobó la ley vigente.

En la actualidad hay en el archipiélago 436 farmacias de las que en 2000 se adjudicaron por concurso 7, otras tantas en 2003, 21 en 2005 y 18 en 2010. Además, se ha convocado un concurso de 4 nuevos despachos farmacéuticos en cumplimiento de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia.

Sansaloni ha resaltado que el decreto ley, que será tramitado posteriormente como proyecto de ley en el Parlament, adapta una normativa que había quedado obsoleta al contabilizar cuatro miembros por unidad familiar en las segundas residencias, frente a los 2,58 que computa hoy el Instituto Nacional de Estadística.

Además, refuerza el papel de la planificación de necesidades con el propósito de desterrar la dinámica de convocatorias de concursos en función de las demandas de los farmacéuticos, ha explicado el conseller, que ha resaltado también que a partir de la entrada en vigor de la nueva regulación será obligatorio revisar el catálogo de farmacias cada cuatro años.

Tendrán que sacarse a concurso al menos 8 de cada 10 farmacias que se consideren necesarias, ha recalcado Sansaloni, quien ha defendido la conveniencia de dejar un cierto número de despachos farmacéuticos autorizados sin adjudicar para regular la oferta de forma gradual.

El decreto incluye asimismo preceptos «para evitar la especulación», como impedir que concurran a los concursos los farmacéuticos que vendan o traspasen sus concesiones durante los siete años posteriores a la operación.

También se amplía de tres a diez años el periodo de permanencia obligatoria al frente de su farmacia de quienes resulten ganadores de los concursos.

Sansaloni ha prometido que el concurso basado en la nueva regulación «saldrá el primer semestre de 2015» y ha incidido en que serán los responsables técnicos quienes revisarán el catálogo de farmacias por autorizar y determinarán cuáles se ponen a disposición de los profesionales.

El conseller ha defendido además el «modelo mediterráneo» de farmacia, que, al contrario del sistema liberalizado anglosajón, regula un número máximo de despachos en función de la población para asegurar que también los habitantes de los pueblos pequeños pueden acceder a las medicinas en su entorno.