Quien compre una vivienda de segunda mano por un precio superior a 600.000 euros paga ahora un tipo medio del 10 por ciento. | Marco Richter - Marco Richter -

El Govern prepara una subida del tramo autonómico del IRPF para las rentas más altas, subida que se concretará en los Presupuestos para el año que viene. Es, por el momento, el único incremento tributario decidido por el Ejecutivo ya que el resto de medidas pactadas por la izquierda sigue en estudio. Es la única vía que ha encontrado para conseguir nuevos ingresos ante la intransigencia de Cristóbal Montoro con la flexibilización del déficit.

Para aprobar esta inminente subida fiscal, el Govern de Francina Armengol ha tenido en cuenta que los ciudadanos con ingresos superiores a los 65.000 euros brutos pagan menos impuestos en Balears que en otras comunidades autónomas.

No pasa lo mismo con quienes cobran entre 25.000 y 60.000 euros brutos al año. En este caso, los residentes en Balears pagan ligeramente por encima de la media.

En principio, la intención del Govern es tocar al alza las rentas más altas sin modificar el resto de tramos inferiores, de forma que a partir de 65.000 euros brutos al año, se aumente la presión fiscal de manera progresiva. Balears tiene establecido un tipo máximo del 45 por ciento frente a otras comunidades como Andalucía, Asturias o Cataluña donde el tipo máximo es del 49 por ciento para las rentas altas.

Además de esta subida, el Govern estudia aumentar la fiscalidad para la compra de viviendas de lujo, con un precio superior a los 2 millones de euros. Ahora pagan un 10 por ciento en impuesto de transmisiones patrimoniales, lo mismo que por una vivienda de 600.000 euros.

El Govern necesita cerrar cuanto antes su previsión de ingresos para aprobar el techo de gasto, es decir, el límite que se permitirá gastar el año que viene, y que superará los 3.000. A partir de esa cantidad, el Ejecutivo deberá endeudarse para pagar deudas ya adquiridas por anterior gobiernos hasta alcanzar una cifra total que superará los 4.000 millones. Se espera que el Consell de Govern de el visto bueno al techo de gasto este mismo viernes.