La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) ha advertido este jueves de que la implantación del impuesto turístico en Baleares 2016 conllevará «pérdidas millonarias» para las empresas y la economía de las islas.

Los hoteleros han reaccionado a través de un comunicado al anuncio del vicepresidente del Govern, Biel Barceló, de que el año próximo se cobrará este impuesto en las islas, si bien no ha concretado cómo se aplicará.

La presidenta de la FEHM, Inmaculada Benito, ha lamentado «la precipitación del anuncio y la falta de consenso» del ejecutivo balear, y ha reiterado que la política turística no puede centrarse «sólo en el diseño de un impuesto turístico».

Benito ha mostrado su sorpresa por el anuncio de este jueves el conseller de Innovación, Investigación y Turismo, Biel Barceló, en el Parlament y ha recordado que los contratos hoteleros para 2016 están ya cerrados.

La dirigente hotelera ha confiado en que la puesta en marcha de este impuesto se haga con el consenso del sector, «tal y como anunció el Govern y no a través de la imposición y sin tener en cuenta los criterios económicos y, por tanto, lastrando la competitividad del destino y de las empresas».

La FEHM recuerda, además, que este impuesto turístico se había planteado siempre y cuando Balears no recibiera una financiación «adecuada» por parte del Estado.

«Nos cuesta creer que Balears no sea capaz, como están haciendo otras comunidades turísticas, de construir acuerdos con el Gobierno de España para conseguir financiación adicional, sin disminuir la competitividad del destino y de las empresas», ha dicho Benito, obviando que éstas sí cobran un impuesto turístico que sólo perjudica, a corto plazo, a los hoteleros mientras que es beneficioso tanto para los turistas futuros como para la comunidad.

La presidenta de los hoteleros ha lamentado que «desde Balears la única solución y la única propuesta a la falta de financiación que se plantea es incrementar la presión fiscal a las empresas, sin medir las consecuencias que ello puede tener en la economía de Balears en su conjunto».

La FEHM espera poder conocer en «profundidad» en los próximos días la propuesta del Govern, e intentará convencer al ejecutivo de que el incremento de la presión fiscal y la aplicación de un nuevo impuesto es una «mala medida en un buen momento económico».

«Las consecuencias para la economía de Baleares pueden ser irreparables» con efectos negativos sobre la inversión, el empleo, el bienestar y la riqueza», ha declarado Benito.