El Govern ha reiterado este viernes que la situación económica de la comunidad hace «inviable» pagar por ahora la carrera profesional a los funcionarios de la comunidad a los que debe tratar «por igual», en respuesta a las advertencias de una «marea blanca» por parte de los trabajadores de la sanidad pública balear.

El portavoz del Govern, Marc Pons, ha apuntado, al ser preguntado por el tema en la rueda de prensa del Consell de Govern, que el planteamiento del ejecutivo balear no es suprimir la carrera profesional sino aplazar su pago, ya que para 2016 suponen 36,6 millones de euros entre todos los empleados públicos de la comunidad, lo que es una cantidad «elevada».

El coste aproximado de aplicación de la carrera profesional y los sexenios en educación para todos los trabajadores de la función pública de Balears es 13,9 millones de euros para 2015, ha añadido el Govern en una nota de prensa.

Los trabajadores de la sanidad pública balear han amenazado con movilizaciones si al menos no se les paga la carrera profesional de 2015 (1,3 millones de euros) comprometida mediante un acuerdo firmado entre Govern y sindicatos entre abril y mayo de este año. «Debemos tratar a todos los funcionarios por igual», ha incidido Pons, quien ha insistido en la necesidad del Govern de «fijar prioridades y establecer calendarios» de pago.

El Govern se debe fijar «objetivos posibles y asumibles», ha destacado Pons, quien ha subrayado también que el ejecutivo autonómico está siempre abierto al diálogo con los representantes de los trabajadores.

Ha señalado que el objetivo es aplazar el pago de la carrera profesional, renegociar su pago, así como los criterios para su concesión.

El conseller de Presidencia ha apelado a la situación presupuestaria de la comunidad que «no es fácil», y en función de la cual el Govern debe fijar sus acciones enfocadas a la atención de la población en condiciones más precarias, por lo que los presupuestos autonómicos del próximo año serán «claramente sociales».

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«Pedimos capacidad de reflexionar y compartir», ha añadido el portavoz, quien ha solicitado tiempo a los sindicatos para poner en marcha el pago de la carrera profesional y analizar los criterios de acceso a ella.

Así, el Govern reconoce que si bien esta retribución supone «un derecho adquirido» de los trabajadores, la situación financiera de la comunidad «hace inviable plantearse ahora la implantación del plus de carrera profesional para el conjunto de trabajadores y trabajadoras de la función pública».

El Govern dice que «garantiza que el cumplimiento de la aplicación del plus de carrera profesional, cuando sea realmente viable, será de aplicación para todo el personal de la CAIB».

El ejecutivo invita una vez más a los sindicatos de la función pública a «repensar un nuevo calendario de aplicación de la medida, y una renegociación de condiciones, donde aparte de los años trabajados, al devengo de la carrera profesional puedan contribuir otros factores como la productividad, la adquisición de nuevos conocimientos».

«El anterior Gobierno actuó con ligereza e irresponsabilidad, jugando con los funcionarios públicos, para evitar un frente abierto durante la campaña electoral», señala el Govern en alusión a los acuerdos de gobierno del 24 de abril y de 8 de mayo sobre carrera profesional que «no contaban con el apoyo presupuestario adecuado».

Los 13,9 millones de euros, que se deberían pagar este año se dividen en 11.380.000 euros de sexenios educación; 1.026.000 de servicios generales, y 1.564.000 euros del IB-Salut.

El aumento de partidas presupuestarias por carrera profesional para 2016 serían, de 15.432.000 euros por sexenios educación; 5.543.000 por servicios generales, y 15.694.000 del IB-Salut, lo que suma 36.669.00 euros.