A raíz de la gran demanda para julio y agosto, está previsto que se alargue la temporada para el sector. | Gemma Andreu

El sector náutico de las Islas vive uno de sus mejores momentos tras la crisis y las aguas de Balears son un atractivo para navegantes de todo el Estado y de Europa. Prueba de ello es que a día de hoy, reservar un amarre para el mes de agosto ya es complicado. Así lo indicó el agente de ventas de Portbooker, Andy Halcón, una empresa con sede en el ParcBit que se dedica a la reserva de amarres y que estos días tiene un stand en la XXXIII edición del Salón Náutico de Palma.

«El verano será muy bueno para los puertos de las Islas ya que en los meses de temporada alta los amarres están prácticamente llenos», indicó Halcón, que comparte las buenas perspectivas de la mayoría de empresarios que participan en la feria náutica instalada en el Moll Vell. A raíz de la gran demanda para los meses de julio y agosto, prevé que se alargue la temporada para el sector. «Se realizarán reservas para junio y para septiembre», confirmó, de modo que el alargamiento de la temporada que ya viven los hoteles y zonas turísticas de las Islas se trasladará también a los puertos baleares. Halcón detalló que las reservas para este verano, en estos momentos, ya están en torno a un 20 % por encima que las del año pasado en la misma época.

Desde Portbooker, que gestionan más de 8.500 amarres en todo el mundo, confirmaron que Balears acapara el 12 % de la náutica de recreo mundial, cuyo principal cliente es extranjero. Los principales demandantes, según nacionalidad, son italianos, españoles, franceses, alemanes y británicos. La media de días que se alquila un amarre es de 6,7, mientras que la eslora media de las embarcaciones, tanto de vela como de motor, es de 14,5 metros.