La nueva dirección de los ‘populares’ quiereque se visualice que comienza un tiempo nuevo y una de las medidas será tratar de recuperar a quienes se descolgaron del partido. | Joan Torres

No todos los imputados quedarán fuera de las listas del PP. La nueva dirección prevé «matizar» el código ético para distinguir entre imputaciones por causas vinculadas a la corrupción e imputaciones por otros motivos. El presidente del partido, Miquel Vidal, explicó que es una de las propuestas que planteará la nueva dirección con el propósito de que quede incorporada en el ideario del partido tras el congreso regional. Vidal explicó, por ejemplo, que no es lo mismo imputaciones que han sufrido militantes del PP por delitos penales que imputaciones como la del exalcalde de Bunyola, que se sienta en el banquillo por un «desgraciado accidente».

La aplicación estricta del código ético provocó una serie de conflictos en la elaboración de las listas. La decisión de José Ramón Bauzá de no aceptar imputados ‘expulsó’ del partido a los exalcaldes de Pollença, Bartomeu Cifre, y de Alaró, Joan Simonet. Ello provocó, a su vez, división en el partido que la nueva dirección del PP tratará de solventar.

La intención es recuperar a aquellos alcaldes que quedaron descolgados por estas imputaciones. El lema del PP es «sumar» para conseguir recuperar las instituciones en las elecciones de 2019. Es una de las ideas planteadas este miércoles por el secretario general del PP, Sebastià Sagreras, en una entrevista concedida a IB3 Ràdio.