El cambio de nombre del aeropuerto madrileño fue aprobado el 24 de marzo de 2014 y la orden la firmó la entonces ministra de Fomento, Ana Pastor. | Efe

Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) pagó el cambio de nombre del aeropuerto Madrid-Barajas, por el de Adolfo Suárez Madrid-Barajas, por una orden expresa del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, según fuentes del Ministerio de Fomento. «El cambio de nombre no lo pidió ninguna institución, sino que la orden llegó directamente desde Presidencia del Gobierno al Ministerio de Fomento, para que AENA se hiciera cargo del coste del cambio, que ascendió a 476.000 euros», indicaron las mismas fuentes.

La orden ministerial de 24 de marzo de 2014, firmada por Ana Pastor, refleja el siguiente argumento para decidir el cambio de nombre: «El presidente Adolfo Suárez ha desempeñado un papel fundamental en la historia de España. Su estatura moral y sentido de Estado han sido claves en el éxito de la Transición española y de la democracia. Su trabajo fue esencial para culminiar uno de los mayores logros conseguidos por España como país: la Constitución de 1978. Por ello y para honrar su memoria, son obligadas las expresiones de reconocimiento y respeto a la grandeza, el esfuerzo y el papel histórico del primer presidente de la democracia».

En el resto de aeropuertos que han logrado cambiarlo, instituciones e iniciativa privada han asumido el pago del cambio. Esto ha sucedido en Santander, Granada, Santiago de Compostela, Málaga y Alicante. El Consell de Mallorca, respecto al cambio de denominación del aeropuerto de Palma de Mallorca por el de Aeropuerto Ramon Llull Palma-Mallorca, señala que AENA «es la que tiene que sufragar el coste». En el Ministerio de Fomento insisten en que la institución que pida el cambio de nombre «es la que tiene que abonar todos los costes».