Un grupo de turistas pasean por los aledaños de la Catedral de Palma. | Pere Bota

Las quejas que hubo durante el pasado verano en Mallorca y resto de Islas por la masificación turística, motivó que el Govern realizara una encuesta para determinar si era verdad que había tal sensación entre la población balear. Los resultados de la misma reflejan todo lo contrario y resaltan que el 60,1 % está satisfecho y de acuerdo con el turismo.

La encuesta fue realizada por la Agència de Turisme Illes Balears (ATB) entre 1.800 personas de todas las Islas durante el pasado mes de octubre.

En los gráficos adjuntos se aprecian los resultados y la valoración que realizaron los ciudadanos sobre el turismo, su impacto social y los efectos sobre la identidad de Balears.

Resultados
Desde la ATB señalan que los residentes son plenamente conscientes de los efectos positivos del turismo, de ahí el apoyo a esta actividad recibido por el 60,1 % de los encuestados.

«Es cierto que hay un 26,7 % que no está de acuerdo o incluso muy en desacuerdo con la actividad turística. Sin embargo, este resultado choca frontalmente con la sensación de turismofobia que parecía que era la tónica general que imperaba el pasado año en las Islas», puntualizan las mismas fuentes.

Es cierto que en los meses de verano, por la mayor afluencia turística, los resultados reflejan un menor apoyo, pero sigue siendo mayoritario y superior a los descontentos.

Respecto a si el turismo afectaba o no a la calidad de vida, el 61,7 % de los ciudadanos afirman que les ayuda a mantener su calidad de vida, mientras que el 18,8 % indica que sí le perjudica.

Una de las preguntas, por novedosa, estaba relacionada con la identidad, cultura y el patrimonio de las Islas, en el sentido de si la afluencia turística perjudica la propia idisiosincrasia balear. El 63,3 %, al respecto, considera que no y que ayuda a mantenerla.

«Los resultados son positivos, pero las valoraciones negativas nos demuestran que hay que trabajar para mejorar aspectos generales y conseguir incrementar los niveles de satisfacción. Es posible con criterios de sostenibilidad y estamos en ello porque consideramos que es prioritario mantener y mejorar la calidad de vida», afirman desde la ATB.