Como acostumbran, publicaron en su perfil de Facebook una imagen del mismo, como muestra de su arte y talento. Inmediatamente, muchos usuarios reaccionaron a esta invención gastronómica, con comentarios no demasiado edificantes y realmente críticos.
La mayor parte de ellos no parecen haberlo probado, por lo que el motivo de sus quejas no es tanto la conjunción de sabores sino el concepto como tal.
A este respecto, otra persona comenta: «pero estas mentes cerradas que hacen críticas tan desagradables, ¿han probado el plato? No puedo entender el desprestigiar por desprestigiar. Ánimo Alejandro, ¡sigue innovando y creando!».
Cabe destacar que la totalidad de las opiniones reflejadas en la red social sobre el establecimiento, que ha abierto sus puertas hace relativamente poco en la calle Pere d'Alcàntara Penya, son más que positivas.
«¡Me encanta! ¡Repetiré! ¡Cocina Original y sabrosa! ¡Atención estupenda!», «todo delicioso, novedoso y elaborado con mucho esmero. El local super bonito y tranquilo. Buena atención», o «tot de primera: carta elaborada, original i bona (poc ventall per triar però tot molt bo); espai ben cuidat i relació qualitat preu molt bona. Hi tornarem!» son algunas de las reacciones de los comensales.
17 comentarios
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Idò jo ja hi he anat 3 vegades a aquest lloc, La mina, i tot és deliciós, ben cuidat i bé de preu. Vaig provar una ensaïmada farcida de calamar i va ser espectacular. Aquesta no l'he provada. Als qui no hi heu anat, voltros vos ho perdeu!
Parece un cagarro
Pareix una altre cosa jaja.
Vivim a un mon de postureo
La veritat és que té un aspecte fastigós. Fa oi veure-la.
Me parece perfecto que se innove en la cocina, pero que le pongan otro nombre como por ejemplo cacadelavaca que le pega mas. La ensaimada es otra cosa.
Aquets s 'enriuen de sa nostra tradició gastronòmica fent aquets desberats com a cuiners si en realidad ho son pérque ho dut i tot, això domés té un nom: ( MERDA ) de plat que no probaría en sa vida.
I dic jo, perque no hi afegeixen un poquet de merda i será més original. Están tocats des bolet.
El problema central existe desde el mismo momento en que a cualquier mamarracho que se ponga frente a unos fogones se le supongan tropecientas estrellas Michelin. Haciendo cuatro pijadas con unas pinzas y un flamete, ya eres un dios. De cartón piedra, por supuesto. El siguiente problema se origina cuando a estos disparatados se les premia con su asistencia, incluso pagando altos precios por comer no-se-sabe-qué.
En cuantos restaurantes se ofrece pamboli de ibéricos? Deberían cerrar esos restaurantes por mezclar algo de aquí con embutidos de fuera? He visto ensaimadas igual de negras es pastelerías, se les fue la mano con el horno Yo gustosamente probaría esta sugerencia, antes de criticarla que aquí parece que es lo que se lleva Ánimo a todos esos cocineros que intentan crear y ofrecernos nuevos platos!!!