El Parlament de Balears acordó ayer poner en marcha «de forma experimental» un sistema que permita que los diputadas y las diputadas de Menorca y de Eivissa y Formentera (sólo hay una parlamentaria de esta última Isla) puedan participar presencialmente en algunas sesiones de la Cámara y, también, votar.

El acuerdo se tomó por unanimidad en una reunión de la comisión de Asuntos Institucionales. El primer paso será solicitar al presidente de la Cámara, Baltasar Picornell, que «interprete» el significado de la palabra «asistir» que recoge el artículo 18 del reglamento del Parlament. Este artículo señala que «los diputados y las diputadas tendrán el deber de asistir a las sesiones del pleno y de las comisiones».

Según la diputada Silvia Tur, que planteó inicialmente este asunto, actualmente hay medios para que no sea imprescindible desplazarse a cada reunión. Aunque la futura reforma del reglamento aborda la votación no presencial, lo que se acordó ayer es que hasta que llegue esa reforma, que entraría en vigor la próxima legislatura, se ponga en marcha un plan piloto al que, de manera voluntaria, podrían acogerse representantes de Menorca y las Pitiüses. En principio estos debates y votaciones no presenciales serían para las reuniones en comisión. Eso obligaría a habilitar un sistema de conexiones. La Mesa del Parlament ha acogido de buen grado la propuesta y ya ha iniciado las gestiones.