El presidente del PP balear, Gabriel Company, afirmó que los resultados de la reunión entre Pedro Sánchez y Francina Armengol habían sido «decepcionantes» y concluyó que el contenido del encuentro se puede resumir con la conocida frase mallorquina «ja te diré coses». «No podemos aceptar que Armengol mire hacia otro lado y no sea tan contundente como lo fue con Mariano Rajoy», afirmó el líder de los ‘populares’.

Company exigió que Armengol trabaje para que el REB esté en vigor el 1 de enero del año que viene y reiteró, que si no ha sido aprobado hasta ahora, ha sido porque la estrategia de la presidenta con Mariano Rajoy «era el ‘Madrid nos mata’».

«Armengol es nefasta para los intereses de los ciudadanos de Balears porque ya rechazó una forma del REB que en estos años habría ahorrado más de 500 millones a las empresas de las Islas», denunció. También criticó a Més, partido del que dijo que se les debería «caer la cara de vergüenza» porque aún no han conseguido que la consellera Catalina Cladera les presente la propuesta de REB que estaba prácticamente cerrado con el exministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.

Xavier Pericay, líder de Ciudadanos, se sumó a las críticas y coincidió en el mismo calificativo que Company para describir los resultados de la reunión: decepcionante. «Fue una reunión perfectamente prescindible y profundamente decepcionante si atendemos a los intereses de los ciudadanos de Balears», aseguró Pericay a través de un comunicado.

En las filas de Més también se comentó la reunión y también se exigió que el REB entre en vigor el 1 de enero de 2019. Lo hizo el diputado Miquel Gallardo, quien ayer aseguró que el nuevo REB significará «una mejora muy importante para nuestras Islas». Gallardó añadió que el encuentro entre Armengol y Sánchez lo cogen «con escepticismo» y aseguró que, si el 1 de enero no está en vigor, solo puede deberse la introducción de «mejoras significativas».