Propietarios de inmuebles, en la Conselleria de Turisme para dar de alta viviendas turísticas o pedir información. | Teresa Ayuga

La reventa de plazas de alquiler turístico es posible. Por tanto, los propietarios que adquieran plazas de la bolsa podrán ponerlas a la venta al precio que deseen. De este modo, una vez que se agoten las plazas de la bolsa, que gestiona la Conselleria de Turisme, los propietarios que quieran destinar sus viviendas a alquiler vacacional podrán comprar plazas a otros propietarios que ya no las utilicen.

Hay que tener en cuenta que únicamente se podrán vender las plazas de alquiler turístico que se concedan desde principios del pasado mes de agosto, que son las únicas que se compran. Las que se consiguieron con anterioridad, es decir, antes de que entrara en vigor la moratoria del 1 de agosto de 2017, no se podrán revender ya que no se tuvieron que adquirir de ninguna bolsa. De hecho, estas plazas, una vez que se den de baja, van a desaparecer.

Condiciones

En cualquier caso, el hecho de comprar plazas a otro propietario y no a la bolsa no eximirá a los nuevos propietarios de cumplir con las condiciones establecidas para tener autorización para una vivienda de alquiler turístico. Es decir, no será suficiente con conseguir las plazas sino que será necesario realizar todos los trámites para conseguir la licencia de Turisme. De este modo, solo podrán tener autorización de alquiler vacacional aquellas viviendas que cumplan con la normativa.

Disponibilidad

El Consorcio Bolsa de Alojamientos Turísticos tiene disponibles para su venta 43.000 plazas en Mallorca, de las cuales se han asignado 10.000 a la oferta hotelera y 20.000 al alquiler turístico. El resto se desbloqueará una vez que se apruebe de forma definitiva el Plan de Intervención en Ámbitos Turísticos del Consell (PIAT).

En el caso de las plazas hoteleras también se podrá producir la venta entre empresarios, y tendrán que cumplir igualmente con la normativa vigente.