Bel Busquets, en la sesión de este martes del Parlament. | CAIB

La diputada del PP Marga Prohens ha reprochado este martes al Govern que imponga el reparto de la recaudación de lo que ha calificado como «ecoestafa», a lo que la vicepresidenta Bel Busquets ha respondido que se han recaudado 200 millones en lo que va de legislatura y la mitad han ido al medio ambiente.

Prohens ha asegurado que, para repartir lo recaudado, el Govern balear «pasa el rodillo en una comisión 'de postureo' para poder hacer lo que quieren hacer con la ecoestafa: comprar fincas, adquirir patrimonio y construir viviendas social».

«Mientras tanto votan no a un proyecto del Ayuntamiento de Manacor para reducir los nitratos en la comarca y la condenan a no tener agua potable, y votan no a mantener la depuradora de Mahón y es Castell y mantienen el centro de vila lleno de excrementos», ha criticado Prohens durante el turno de preguntas de control al ejecutivo en el pleno del Parlament.

«Es su obligación priorizar el tema del agua con la ecoestafa», ha reivindicado Prohens, que ha admitido la necesidad de invertir en vivienda social, pero ha criticado que «la ecoestafa no puede tapar la incapacidad de no haber hecho ni una sola vivienda protección oficial con 1.300 millones de euros más de presupuesto esta legislatura».

También le ha reprochado a la vicepresidenta que sea incapaz de regular el todo incluido esta legislatura pero pague «300 euros el cubierto a periodistas de Londres para que hablen bien de usted».

«Pero 17.000 euros no sirven para tapar su incapacidad, su turismofobia o que las playas y el centro de Vila está lleno de excrementos», ha subrayado Prohens.
Busquets ha negado la imposición y ha recalcado que si el Govern del PP aprobó 29 decretos ley en la pasada legislatura, en la actual solo han sido 8 «y por cuestiones de necesidad». Ha dicho sentirse «muy orgullosa» del impuesto turístico y ha insistido en que los populares «pasaban el rodillo a diestro y siniestro en la pasada legislatura».
La vicepresidenta ha defendido que el impuesto de turismo sostenible «tiene el apoyo de la ciudadanía» y no ha registrado ninguna incidencia de pago por parte de los turistas.
Sobre el reparto de la recaudación ha detallado que «pasa por una comisión y una plenaria, que acoge el 80 % de los votos favorables, dos votos en contra y dos abstenciones».

Según la vicepresidenta, en dos años y medio el impuesto ha permitido recaudar 200 millones, 100 de los cuales van a proyectos medioambientales y 40 de ellos al ciclo del agua; 34 millones a inversiones en cultura, 40 a diversificación de la economía y formación y 26 millones a vivienda «porque el turismo genera unos recursos que pueden revertir en mejores servicios a la ciudadanía».