El Servicio de vigilancia de la posidonia ha comprobado este verano, entre los meses de mayo y septiembre, el anclaje y la cadena a un total de 86.207 embarcaciones en Baleares y ha determinado que, de éstas, 8.504 estaban mal fondeadas --un 9,86 por ciento del total--, por lo que han tenido que ser reubicadas. Así lo informó ayer el conseller de Medi Ambient i Territori, Miquel Mir, en rueda de prensa, quien añadió que los agentes del área, quienes tienen competencia sancionadora junto con la Guardia Civil, han realizado un total de 123 salidas de vigilancia y han levantado 130 actas por dicha práctica, frente a las 42 abiertas de la última temporada. El conseller añadió que, por islas, en Mallorca se han hecho un total de 28.612 embarcaciones --5.884 de informar, 6.346 de asesorar y 11.416 de comprobación--, en Ibiza han sido 37.708 --2.070 de informar, 1.352 de asesorar y 37.708 de comprobar--, en Formentera, 42.578, donde más se han hecho --1.697 de informar, 726 de asesoras y 39.779 de comprobar--. Finalmente, en Menorca se han realizado 12.347 actuaciones, 6.779 de informar, 1.590 de asesorar y 2.091 de comprobar. Dichas cifras se corresponden a la temporada de verano únicamente. El servicio de vigilancia --que cuenta con 15 embarcaciones más 27 más involucradas-- empezó en Ibiza y Formentera en el mes de mayo y en Mallorca y Menorca en junio, si bien en todo el archipiélago terminó el pasado 30 de septiembre.