Desde la Federación de Estaciones de Servicios de Baleares aseguran que tienen «poco margen» de maniobra en cuanto a precios. | Pere Bota

Llenar el depósito del vehículo es a día de hoy entre un 30 y un 40 por ciento más caro que hace una década en Baleares, si bien a lo largo de estos diez años ha habido diferentes variaciones. Sin embargo, si se compara el coste medio en las Islas de noviembre de 2019, último dato disponible en la página web del Ministerio de Transición Ecológica, con la media anual registrada en el conjunto del año 2009.

Este incremento representa un coste añadido más para el bolsillo de los ciudadanos, que a lo largo de los últimos años han visto cómo se encarecía el nivel de vida a un ritmo superior que su poder adquisitivo.

Evolución

En el año 2009, el precio medio del gasóleo en Baleares se situó en 0,908 euros, de modo que llenar un depósito de 50 litros tenía un coste de 45,4 euros. Diez años más tarde, el litro estaba en 1,277 euros y llenar un depósito de la misma capacidad salía por 63,85 euros. Esto es, un 40,6 por ciento más. En cuanto a la gasolina, el litro costaba un euro en 2009 y llenar el depósito suponía un desembolso de 50 euros. En noviembre de 2019, el litro de la gasolina alcanzó los 1,355 euros y llenar el depósito costaba 66,75 euros, un 33,5 por ciento más.

Además, los precios de los carburantes de las Islas son los más altos de España, algo que se debe sobre todo a la insularidad, según reconoce el presidente de la Federación de Estaciones de Servicio de Baleares, Jesús Salas. Asimismo, recordó que en la actualidad ya no influye el denominado ‘céntimo sanitario’, un impuesto sobre los hidrocarburos que durante unos años varió el porcentaje en función de la comunidad pero que a día de hoy es unánime en todo el Estado.

En cualquier caso, Salas reconoció que los empresarios del sector tienen «poco margen» de maniobra sobre los precios, que vienen muy marcados por factores geopolíticos. Así, se refirió a la escalada de tensiones en el conflicto entre Estados Unidos e Irán en el final de 2019 y principio de este 2020, que llevaron a una espiral alcista en el precio del barril de petróleo, situándose por encima de la cota de los 70 dólares. «Los empresarios tenemos las manos atadas», reconoció, si bien advirtió de que en los últimos ciertos «hay cierta estabilidad en el precio final».

Sin embargo, en los próximos meses podrían producirse cambios sustanciales y una evolución de los precios al alza. Salas recordó el anuncio del actual Gobierno estatal de incrementar los impuestos de los hidrocarburos, pues España tiene los segundos más bajos de la Unión Europea. «Esto sí que supondría una subida importante de precios», dijo.