La consellera Fina Santiago, reclama que todo lo recaudado con la casilla social en las Islas se invierta en el territorio. | Europa Press

Baleares recibirá 4,7 millones de euros correspondientes a la distribución por comunidades autónomas que hace el Estado de la recaudación del IRPF social de 2020. Según ha informado la Conselleria de Asuntos Sociales y Deportes en un comunicado, así lo ha aprobado este jueves el Consejo Territorial de Servicios Sociales y del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia.

La consellera del ramo, Fina Santiago, que ha participado en la reunión telemática, ha celebrado la evolución de las cuantías que llegan al archipiélago de forma progresiva desde que se asumió la gestión, aunque ha lamentado que todavía «son insuficientes» y ha reclamado que la recaudación de Baleares se invierta «en la totalidad en el territorio».

Según han explicado, desde el 2017 se han financiado 343 proyectos de entidades sociales por un total de 10,7 millones de euros. Este año Baleares recibirá 655.000 euros más que en 2019, año en el que se pudieron ejecutar 137 proyectos sociales.
De este modo, el incremento ha sido constante desde 2017 cuando llegaron 2,9 millones de euros para este fin. En 2018 fueron 3,68 millones y el último ejercicio 4 millones.

Este aumento presupuestario también se ha traducido en un crecimiento constante de los proyectos que se han podido adherir a la convocatoria de subvenciones financiadas por el IRPF; en 2017 fueron 77, 129 en 2018 y los mencionados 137 de 2019.

Para Santiago esta evolución es «positiva pero insuficiente» porque considera que toda la recaudación que se hace en Baleares a través de esta casilla social del IRPF debería poder invertirse en la totalidad en el territorio.

Se han corregido parte de los criterios del reparto que hace el Estado, pero la consellera no lo considera suficiente. En todo caso, la Conselleria ha remarcado la importancia de la evolución creciente de las cuantías que llegan a Baleares, sobre todo teniendo en cuenta que hasta hace tres años el

Estado no permitía que las comunidades autónomas gestionasen las subvenciones del 0,7 por ciento del IRPF, como le exigían diferentes sentencias del Tribunal Constitucional y que lo ordenó cumplir el año 2017.

Santiago ha señalado que gracias a que las comunidades autónomas tienen la gestión, cada día «se lucha» para que los indicadores sean más justos y más objetivos. La consellera ha celebrado que, gracias a que Baleares gestiona directamente parte del dinero que los contribuyentes destinan a fines sociales, asociaciones de ámbito municipal de esta comunidad puedan recibir subvenciones para ayudar a los que tienen cerca.

Santiago ha constatado que la gestión del IRPF por parte de las CCAA ha permitido una «mejor distribución» de los créditos entre las autonomías porque «se ha mejorado en transparencia».

Según ha indicado, ahora se conoce lo que recauda y recibe cada comunidad y, en consecuencia, se puede defender una mejora de la distribución de los fondos.