Las previsiones respecto a las listas de espera sanitarias se están cumpliendo y en el mes de abril, el más duro del confinamiento, se incrementó en un 223,5 % el número de pacientes que esperan más de seis meses para ser intervenidos. Un total de 2.368 personas acumulan retrasos de más de seis meses que, en una situación sin pandemia, tendrían derecho a acogerse al Decreto de Garantía de Demora que ha quedado suspendido por la emergencia sanitaria por el coronavirus.

Hay 12.676 personas que esperan para operarse en la sanidad pública, apenas un incremento del 1,69 % respecto al mes de abril del año anterior cuando eran 12.465. Que la cifra se mantenga es comprensible pues durante el estado de alarma apenas ha habido consultas médicas, más allá de las urgentes o las que podían resolverse de forma telefónica, por lo que en abril no hubo muchos pacientes a los que se le prescribiera una operación.

La cifra que sube de forma significativa y casi se duplica es el tiempo medio que tendrán que esperar estas 12.676 personas para la intervención quirúrgica. Si hace un año eran 77,86 días, es decir, dos meses y medio, ahora son cuatro meses de media.

Sin embargo, Salut es consciente del problema y ha reactivado la actividad quirúrgica en todos los hospitales de forma que si se cumplen las previsiones en este mes de junio se recuperarán las cifras de trabajo del pasado mes de marzo.

La intención, a falta de conocer la actividad de la última semana de este mes, es alcanzar las 3.500 intervenciones en el cómputo global de todos los centros, lo que supondría que se han hecho mil operaciones más que el mes de mayo en una tendencia que sigue creciendo. A modo de comparación: en los meses de enero y febrero se realizaron más de 5.000 operaciones en los hospitales públicos de las Islas.

Primera consulta

En la actualizón que Salut publicó este viernes de la evolución de las listas de espera se ve la huella de la paralización del sistema sanitario para atender a las víctimas de la COVID-19. El único indicador que baja es el de pacientes que esperan para una primera consulta con el especialista, con una explicación similar a la quirúrgica y es que durante estos meses han dejado de atenderse todos los casos excepto los urgentes y oncológicos.

En concreto el pasado abril había 38.308 personas esperando una primera visita con el especialista, un 14,03 % menos que el mismo mes del año pasado cuando eran 44.562. Sin embargo, estos 38.308 pacientes tendrán que esperar un 89,24 % más de media que los 44.562 de hace un año y tardarán más de dos meses en ser vistos por el médico, uno más que en 2019.

Se dispara el tiempo de espera y se ensaña en especial con 21.180 personas que sobrepasarán los tres meses para ser vistos por primera vez por un especialista, cuando el año pasado esta dilatada demora apenas afectaba a 7.239 pacientes.

Reabren las Unidades Básicas de Salud, salvo alguna excepción

Si no han abierto ya, lo harán en los próximos días. Las Unidades Básicas de Salud (UBS) cuya actividad durante el estado de alarma se destinó a lo meramente administrativo, vuelven a abrir sus puertas durante esta semana y los próximos días, salvo en contadas excepciones. Una de ellas es el caso del Molinar, donde se ha ubicado la central base para gestionar la COVID-19.

Es de donde parten las Unidades Volantes de Atención al Coronavirus (UVAC) y se coordina la vigilancia de casos y los rastreos de contactos estrechos. Por otra parte la UBS del Hospital General está en obras, mientras que algunas otras no abren porque seguirán ejerciendo de COVID exprés o el caso de Escorca que continuará cerrada porque apenas tiene demanda.