Un momento de la reunión celebrada en la tarde de este lunes. | Teresa Ayuga

El presidente del PI, Antoni Amengual, y otros cuatro cargos de la ejecutiva presentaron este lunes su dimisión por sorpresa en el transcurso de una tensa ejecutiva convocada por la tarde tras fuertes tensiones vividas por la formación en las últimas semanas. Junto a Amengual, dejan el cargo Lina Pons, que era vicepresidenta; Gori Ferrà, Josep Franco y Sebastià Salas.

Las dimisiones llegan tras semanas de enfrentamientos entre las dos almas del PI, la que procede de la Lliga de Jaume Font y la que llega de la mano de Josep Melià y Convergència per les Illes. En el origen está la elección del futuro candidato a la Presidència de la Comunitat Autònoma para las elecciones del año 2023.

Amengual anunció en una reciente ejecutiva su decisión de convocar unas primarias pasado el verano y el sector de Melià comenzó a trabajar para presentar un candidato alternativo al del presidente de la formación. Consideran que Amengual no es el candidato que debe liderar el proyecto en 2023 y apuestan por un modelo parecido al del PNV, con dos cabezas visibles.

La carta contra Melià

Estos movimientos del sector de Melià provocaron una rápida respuesta de los sectores alineados con Amengual. Las agrupaciones de varios municipios, entre ellas las de Sant Llorenç, Inca, Maria de la Salut, sa Pobla, Muro y Bunyola, firmaron una dura carta en la que se pide a la dirección que tome medidas contra Melià.

En su escrito se refieren a una reunión celebrada el pasado 19 de junio por el Consell General de la formación en la que Antoni Amengual fue muy crítico con el diputado Josep Melià. Aseguran que el proyecto no puede crecer ni conseguir sus objetivos si no hay una única dirección y, en consecuencia, instan al presidente y al resto de órganos del partido a que cese «toda la actividad pública» realizada por Melià, con la petición expresa de que deje de compartir el cargo de portavoz con Lina Pons o deje de aparecer junto al presidente de la formación.

En su parte más dura se insta a los órganos de dirección del PI a que «inviten» a Melià a dejar todos los cargos del partido. «Solo así se podrá llegar a la cohesión necesaria en nuestra formación para poder dar continuidad al proyecto que representa el PI», señalan en su escrito.

Dos dimisiones

La dimisión de Antoni Amengual y de buen parte de la ejecutiva abre una profunda crisis en la formación, que hace poco más de un año ya vio cómo dimitía otro presidente, Jaume Font. Antoni Amengual fue elegido sustituto de Font en un congreso que se celebró en junio del año pasado, por lo que lleva poco más de un año en el cargo.

El presidente no quiso hacer ayer declaraciones y los dimisionarios darán hoy una rueda de prensa para explicar con detalle las razones de su salida. El partido deberá convocar ahora un congreso extraordinario, que podría celebrarse el próximo mes de septiembre y en el que las dos corrientes volverán a medir sus fuerzas tras la precipitada salida de Jaume Font.

La reunión de este lunes tuvo momentos tensos y todos los participantes mostraron semblantes muy serios al inicio de la convocatoria. La crisis del PI deja al Grup Parlamentari y el grupo de consellers en el Consell partido por la mitad ya que hay representantes de las dos corrientes.

Una dimisión «irrevocable» que explicará este martes

«Hoy he presentado a la ejecutiva de la formación mi dimisión irrevocable del cargo de presidente del PI. Ha sido una decisión muy meditada y compartida con otros compañeros que también dejarán la dirección», aseguró ayer Amengual en su cuenta de Twitter. El presidente ha convocado una rueda de prensa para explicar las razones que le han llevado a dejar la presidencia un año después de asumir el cargo.