4.833 personas se han puesto en contacto con el Teléfono de Esperanza. | ARCHIVO

Un total de 219 personas han pedido ayuda al Teléfono de la Esperanza por ideas suicidas entre enero y noviembre de 2021. De estas, siete llamaron en el mismo momento en que querían acabar con su vida. Sin embargo, coger el teléfono para verbalizar ese deseo puede salvar vidas. Así lo sostiene el portavoz de la ONG en Balears, Lino Salas, en el balance anual y destaca que el 70 % de las llamadas por temática suicida agradecen la ayuda de los voluntarios. Salas sostiene que «en el caso de las personas que llamaron con temática suicida es muy importante que hayan pedido ayuda».

En total, 4.833 personas se han puesto en contacto con el Teléfono de Esperanza. Esto representa casi el doble de llamadas con respecto al mismo periodo en 2020 (2.506) y más del cuádruple que en 2019 (1.056). De estas consultas, 43 personas verbalizaron su sufrimiento debido a la pandemia, aunque la gran mayoría de las llamadas se debe al temor y la preocupación por contagiarse y por esta crisis sanitaria. De hecho, según las últimas cifras del Teléfono de la Esperanza, la mayoría manifestó pasar por un problema de soledad o incomunicación debido al coronavirus.

Perfil

El 61 % de las personas que pidieron ayuda eran mujeres, frente al 38 % de hombres. La edad media se encuentra entre los 36 y 65 años. A pesar de que la diferencia entre ambos géneros es mínima, Salas explica que la cifra de mujeres que piden ayuda se dispara cuantas más llamadas haya. Por otra parte, la mayoría de las atenciones telefónicas duraron entre 12 y 25 minutos.

El portavoz justifica el incremento de consultas a que la gente, de cada vez más, pide ayuda. «Lo que está pasando en los últimos cuatro años es que cada vez se habla y se afronta más el tema del suicidio. Se está normalizando y esto es muy positivo».
El número del Teléfono de la Esperanza en Balears es el 971 46 11 12 y está disponible las 24 horas del día. También está operativo el 112 y el 024.