Antoni Costa, en una imagen de archivo. | Jaume Morey

Todos los partidos de la oposición con representación parlamentaria censuraron ayer el modo en que había elegido el Govern para presentar el texto de la futura ley del turismo, aprobada por decreto pero que luego pasará por el Parlament y donde habrá opción a presentar enmiendas. El PP, principal partido de la oposición, tildó de «vergüenza»    todo lo que ha acompañado al proceso de elaboración. El PP, sin embargo, no cuestionó el fondo. Según el portavoz parlamentario, Antoni Costa, comparten algunos objetivos.

«Es una vergüenza que solo unos pocos hayan podido ver el texto y que se haya ninguneado al Parlament», indicó antes de que el BOIB publicara el decreto. Según Costa, «el PP es un partido serio» y analizará el texto. Dijo que no veía mal la fórmula elegida para la bolsa de plazas y que tampoco se oponen a que no haya más crecimiento, aunque sí a cualquier decrecimiento. El PP mantiene para el próximo martes una moción en la que planteará su propuesta ante el pleno del Parlament.

Los reproches más duros, tanto en el fondo como en la forma, vinieron ayer de Ciudadanos (Cs) y de su coordinadora, Patricia Guasp. El partido naranja siempre había defendido, hasta ahora, la fórmula del Govern para plantear sus propuestas que tienen que ver con la economía en el llamado Pacto de Reactivación, donde hay representantes de las organizaciones sociales y de los partidos, como Cs, que habían querido sumarse. Toda esa confianza se ha roto con el decreto turístico.

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«El Pacto de Reactivación ha saltado por los aires con este falso diálogo y consenso fake de Armengol», dijo. Acusó al conseller Negueruela de «mentir» y afirmó que «está sobre la mesa» dejar ese foro social.

Lo que ha quedado claro, dijo, es que «el objetivo de esta ley es bloquear las plazas para contentar a los socios del Govern».   

El PI y Vox se sumaron a las críticas. Lina Pons, en una primera reacción a la espera de una lectura amplia del texto, lamentó no haber tenido conocimiento previo y se preguntó cuál es la incidencia real del bloqueo de plazas y si se atenderán sus reclamaciones. Según Idoia Ribas (Vox), la nueva norma «ignora a trabajadores, oferta complementaria y pequeños hoteleros en favor de las grandes cadenas y la subvención a los sindicatos».

El apunte

Sin fisuras en la izquierda, aval garantizado

El decreto aprobado este viernes, y que ya está en vigor, será convalidado por el Parlament sin las dudas que le generó al Gobierno estatal la reforma laboral. Tiene votos suficientes. Todos los partidos del Govern mostraron su apoyo y, también Més per Menorca, que se atribuyó el éxito de que se vayan a suspender plazas.