Un momento de la reunión. | Jaume Morey

Govern y sindicatos han hecho un llamamiento a las empresas para que incorporen a los trabajadores fijos discontinuos a partir de abril, después de que el Gobierno central haya acordado un prórroga de los ERTEpor COVID hasta el 31 de marzo. Después de casi una hora de reunión de la Mesa de Diálogo Social, el conseller de Modelo Económico y Turismo, Iago Negueruela, ha valorado positivamente la decisión del Ejecutivo de Pedro Sánchez, ya que «con los datos en la mano creíamos imprescindible llegar hasta el mes de abril».

Por ello, ha hecho un llamamiento expreso para que estos trabajadores -cerca de 60.000 fijos-discontinuos que siguen cobrando prestaciones a día de hoy- se incorporen a sus puestos de trabajo a partir del 1 de abril. Máxime, subrayó Negueruela, cuando las previsiones para la temporada turística son óptimas. «Es el momento de exigirlo», ha sentenciado. La idea del Govern es que todos esos trabajadores puedan estar ocupando sus puestos de trabajo a partir, como tarde, de la Semana Santa. Es más, «creemos que en marzo ya se incorporará una parte importantísima». El conseller argumentó que este perfil de trabajador precisa de un mínimo de seis meses al año para generar prestaciones, por lo que abril sería lo más tarde en que deberían incorporarse a sus puestos de trabajo para cubrir esa condición. Además, «sus rentas salariales serán mayores cobrando desde la empresa y no desde la prestación».

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Desde UGT y CCOO, sus respectivos secretarios generales, Lorenzo Navarro y José Luis García, se han sumado al llamamiento de Negueruela amparándose en las expectativas para la temporada. «Exigimos a las empresas que por responsabilidad y para seguir con la reactivación económica reincorporen a sus trabajadores», ha manifestado Bravo para añadir que «nosotros hemos estado a la altura de las circunstancias, ahora le toca a las empresas». En similares términos se ha expresado García al señalar que «a las puertas de la Semana Santa es un buen momento para que especialmente las empresas turísticas reincorporen a sus empleados».

También se sumó al llamamiento Jordi Mora, presidente de PIMEM, quien ha subrayado que desde la patronal «intentaremos impulsar que todas las empresas turísticas reinicien su actividad a partir de abril». Por su parte, el vicepresidente de CAEB, Rafel Roig, aportó la lectura crítica al señalar que «es buena noticia para los trabajadores pero no para los empresarios». En ese sentido, Roig señaló la dificultad para que todo el empresariado cumpla con esas exigencias, ya que «habrá algunas zonas turísticas que no empezarán su temporada en Semana Santa».