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El Govern ha pedido "responsabilidad" al sector del transporte tras la huelga de este lunes, "que no había sido convocada de manera oficial y que no ha beneficiado a nadie", y ha insistido en que "el abastecimiento está garantizado" en Baleares.


Así se ha expresado en rueda de prensa el director general de Movilidad y Transporte Terrestre, Jaume Mateu, quien ha lamentado que lo único que se consigue con esto "es dar más problemas de los que hay sin ofrecer una solución inmediata".


"Entendemos las dificultades del sector y estamos en contacto permanente para trabajar juntos y abordar estas dificultades, por ello la reacción del Govern frente a la subida del precio del combustible ha sido inmediata", ha añadido.


En este punto, ha recordado que la presidenta del Ejecutivo balear, Francina Armengol, ha pedido un plan de medidas para hacer frente a la escalada de precios, ya que en Baleares el sector del transporte es "más estratégico" porque depende del transporte aéreo y marítimo para funcionar.

Este plan, ha continuado, aunque "no está concretado", pone dos opciones encima de la mesa, como son ayudas directas a través de subvenciones o la fiscalidad en los impuestos, es decir, una rebaja de los mismos. "Se está valorando por parte del Gobierno central, no tenemos detalles de las actuaciones pero estas dos opciones son las que están", ha manifestado el director general.

Por todo ello, ha pedido "calma" a la población, asegurando que "no hay riesgo de desabastecimiento" en el archipiélago y que los sectores de mercadería "funcionan". "Nos encontramos frente a una crisis que nos coge superando la anterior, la de la COVID-19, de la que hemos salido trabajando juntos con calma y tranquilidad, y es la fórmula que repetiremos en esta nueva situación", por lo que "no se deben repetir las imágenes de gente comprando de forma exagerada", ha concluido.