Sergi se recupera de la intervención en el hospital de Son Espases. | G.Moragues

«Cuando los necesitamos están de verdad. Sin la ayuda de la Policía Local mi sobrino habría perdido un dedo». Gabriel Moragues, vecino de Palma, revive lo que pasó este domingo por la tarde todavía con el susto en el cuerpo. Eran las 19 horas de un domingo casi de verano, sus hijos y sus sobrinos estaban jugando en casa, cuando una de las niñas pegó un portazo, con tan mala suerte que le amputó una de las extremidades a su primo, el pequeño Sergi, de 10 años.

«Nos asustamos muchísimo, había mucha sangre, y los niños estaban impresionados. Cuando pasa algo así los nervios te llevan, por suerte, conseguí encontrar la parte del dedo amputado y colocarlo junto al muñón y salir corriendo hacía el hospital de Son Espases», cuenta Moragues, al que su experiencia como auxiliar de enfermería le permitió actuar correctamente durante el accidente. «La situación era crítica y era importante llegar rápido para poderle salvar el dedo», añade.

Fue justo en ese momento, al salir de casa, cuando se encontraron a dos agentes de la Policía Local que se han convertido en los guardianes del pequeño. «Nos vieron nerviosos y les dijimos que teníamos que llegar lo antes posible al hospital, sin pensarlo, se desvivieron por nosotros. Nos escoltaron los dos motoristas y abrieron paso entre los coches, en cuestión de minutos llegamos a urgencias», cuenta. Moragues, muy agradecido por la actuación de los agentes, todavía recuerda con angustia los momentos de tensión que vivió este pasado domingo.

«Los agentes avisaron al hospital, no perdieron ni un segundo de tiempo. El motorista se desvivió por Sergi, se portaron súper bien. Estamos muy agradecidos, tanto del equipo médico de Son Espases como de los agentes que nos ayudaron a llegar a tiempo, sin su ayuda podría haber perdido el dedo», explica. Y añade: «Cuando los necesitamos están de verdad, corren por nosotros y nos ayudan».

A pesar del sobresalto, esta es una historia con final feliz. El equipo médico de Son Espases intervino de urgencias al menor y consiguieron recuperarle el dedo. El pequeño Sergi recibirá el alta la tarde de este lunes, desde la cama del hospital solo piensa en volver a casa y jugar de nuevo con su hermana y sus primas.