Se trató de una inspección conjunta de la Guardia Civil con Seguridad Alimentaria y el Servicio de Ganadería del Govern Balear. | OPC

Agentes del SEPRONA de la Guardia Civil han realizado una inspección conjunta con Seguridad Alimentaria y el Servicio de Ganadería del Govern balear en la que se han retirado 300 animales de una explotación ganadera en Palma por incumplir la Ley de Sanidad Animal y de Salud Pública Balear.

Según ha informado este domingo la Guardia Civil en un comunicado, los agentes realizaron una inspección en una explotación ganadera ubicada en Palma, dedicada a ganado ovino y caprino y hallaron un matadero clandestino de corderos que no reunía ningún tipo de condiciones para el sacrifico de los animales.

En la finca encontraron unos 25 corderos en despiece y 210 vivos, así como 90 cabras vivas encerradas en establos. El responsable de la finca no poseía documentación de trazabilidad de los animales, y el sacrificio de éstos se estaba haciendo sin ninguna medida de aturdimiento previo, así como en pésimas condiciones higiénico sanitarias. Esto podría ocasionar un grave problema de salud alimentaria para los consumidores, ha alertado la Guardia Civil.

Ganadería ha intervenido todo el ganado ovino y caprino que había en la finca, y el responsable de la finca será propuesto para sanción por parte de los inspectores.