Los GEAS de la Guardia Civil sacaron el cuerpo del agua, en el Passeig Marítim, frente a es Jonquet.  | Alejandro Sepúlveda

La Guardia Civil está investigando si la mujer colombiana, de unos 30 años de edad, que fue hallada sin vida en aguas el Paseo Marítimo de Palma el pasado 15 de agosto, entre unos barcos amarrados, pudo ser atacada. En un principio se pensó que se trataba de un suicidio, pero las pruebas realizadas podrían apuntar a que ya estaba muerta cuando cayó al agua.

El macabro hallazgo lo llevaron a cabo unos turistas de forma accidental, poco antes del mediodía, cuando paseaban junto al mar, a la altura de es Jonquet, y repararon en un bulto junto a un velero, flotando. Se trataba del cadáver de una fémina y hasta esa dirección se trasladaron agentes de la Policía Local, Policía del Puerto, Policía Nacional y Guardia Civil.

Investigación

Finalmente, se hizo cargo de la investigación la Benemérita y los GEAS (Grupo Especial de Actividades Subacuáticas) sacaron el cadáver del mar y confirmaron que se trataba de una persona de sexo femenino, de unos 30 años de edad. No presentaba golpes o señales de violencia y, después, se confirmó que se trataba de una colombiana que residía en Palma con otros familiares. Llevaba un día y medio en el mar, aunque a simple vista parecía que hacía más tiempo. Desde el primer momento se apuntó a un suicidio o muerte accidental para aclarar lo ocurrido, pero había algunos datos que no cuadraban. Ella no vivía por esa zona y no la frecuentaba, por lo que era extraño que hubiera elegido el Marítimo para quitarse la vida.

Además, su madre negó de forma categórica que tuviera intención de quitarse la vida. Las dudas se dispararon cuando unas pruebas apuntan que no tenía agua en los pulmones, por lo que no murió ahogada, sino antes de caer al agua. Ahora, los investigadores están buscando a unos individuos de su entorno para tomarles declaración y tratar de aclarar qué pasó en realidad aquel día 14 de agosto, que es cuando se estima que cayó al mar.