El diario británico recogió hace unos días la noticia de la brutal agresión con fotografías muy duras de las secuelas que presenta la víctima. El padre del herido denuncia que Magaluf no es un destino seguro. | Michel's/The Sun

Nuevo episodio de extrema violencia en Punta Ballena, Magaluf. Hace unos días, Joshua Pisticcio, un joven británico de 24 años de Cardiff, resultó brutalmente agredido por uno de los porteros de un conocido local de ocio nocturno.El inglés, director de una empresa de fabricación de acero estructural, fue atacado y golpeado brutalmente hasta dejarlo en coma.

La noticia, adelantada por el diario británico The Sun, ha generado una gran polémica e indignación en Cardiff, ciudad de donde es natural la víctima.El joven precisó una cirugía de urgencia sufriendo una fractura en el pómulo, nariz, mandíbula, así como una hemorragia en el cerebro. El británico también pasó de dos a tres días en coma inducido tras el ataque.

Secuelas graves

A consecuencia de la agresión, la víctima sufre problemas de memoria y presenta secuelas de consideración.Es más, en un primer momento, se llegó a temer por su vida. En declaraciones al The Sun, el padre de Joshua, Steven, también de Cardiff, afirma que el impactante ataque se produjo después de que el amigo de su hijo derramara una bebida en el club nocturno Tiger Tiger en Magaluf Strip. Steven viajó con cinco amigos y sus hijos, todos de poco más de 20 años, a finales del mes de junio a Magaluf. «En la primera noche, un par de muchachos estaban jugando, dando a los demás un paseo a cuestas en el club nocturno», señala el padre.

Steven admite que el grupo estaba jugando, pero dice que su hijo no era uno de ellos y que fue atacado cuando trató de actuar como pacificador entre la seguridad del local y sus compatriotas. En su declaración, los afectados sostienen que uno de los muchachos del grupo había derramado una bebida en la esquina y los porteros se estaban cebando con él. «Siendo uno de los chicos mayores del grupo, vi que esto sucedía y me acerqué para tratar de calmar la situación. Los otros integrantes de la pandilla dijeron que me dirigí hacia la salida con uno de los porteros. Según ellos,    habían pasado alrededor de 20 minutos y no me veían por ninguna parte», señala el herido.

Cuando los amigos de Joshua salieron a buscarlo, lo encontraron boca abajo en el camino con sangre en la cabeza. Uno de los ingleses corrió a recogerlo mientras que otro entró a buscar ayuda. Cuando salió el resto del grupo, Joshua dice que se encontraron con el equipo de seguridad pegando a la gente y que el portero –un ’gigante’– comenzó a atacar a todos los demás. Personal de seguridad de locales de la zona han confirmado a Ultima Hora que efectivamente se produjo esa agresión y que uno de los porteros se excedió. De hecho, el integrante del equipo de seguridad dejó de trabajar en ese local y en otros de Magaluf. Se trata de una persona bastante conflictiva de una gran corpulencia y portento físico que, meses atrás, fue detenido por graves altercados y golpear a gente.