La Audiencia Provincial de Baleares ha confirmado la condena. | Pere Bota

La Audiencia Provincial de Baleares ha confirmado una condena contra un policía local por amenazar al empleado de una gasolinera de Calvià, en la isla de Mallorca, al que advirtió que «le iban a pasar cositas», con alusiones a un atraco previo, tras mostrarle su placa de Policía durante una discusión mientras estaba fuera de servicio. La Audiencia ha rechazado el recurso presentado por el policía contra la sentencia dictada por un Juzgado de Instrucción de Palma, confirmando una multa de 360 euros y el pago de las costas. Según considera acreditado la sentencia, el incidente tuvo lugar el 14 de mayo de 2022, cuando el demandado acudió a repostar a una gasolinera de Calvià.

Según una testigo, otra clienta de la gasolinera, al llegar el policía hizo una maniobra indebida para colocarse de los primeros en la fila y acceder al surtidor. El empleado le hizo un reproche por ello y el policía, que no se encontraba de servicio, le exhibió su placa y a continuación le pidió el libro de reclamaciones. Una vez dentro de la gasolinera, el empleado se negó a firmar la reclamación redactada por el policía. Según indicó en el juicio la testigo, el empleado no estaba de acuerdo con el relato que había puesto el cliente y quería redactar él su propio relato.

La sentencia recoge que le dijo al empleado que «le iban a pasar cositas», «hay gente que se las busca y se las merece», y también: «Ya te atracaron una vez y no me extrañaría que pasara otra vez». Estas expresiones harían referencia a un atraco que el empleado había sufrido tiempo atrás, en el cual había sido apuñalado. La defensa del policía impugnó la sentencia considerando que no se podía demostrar que había referido esas expresiones, pero el Tribunal rechaza su recurso apoyándose en el testimonio de la testigo.