Un Policía Tutor imparte una charla de prevención de acoso escolar en un colegio.

Los casos de acoso escolar atendidos por el Policía Tutor se han incrementado en Baleares tras el fin de la pandemia, según ha informado Rafel Covas, coordinador programa Policía Tutor del Govern. En concreto, en el curso escolar 2018-19 realizaron 94 actuaciones en los centros educativos, mientras que en el 2020-21 el número de intervenciones ascendió a 108, las mismas que en el 2021-22. El 2019-20 no se debe tener en cuenta, ya que fue el de la pandemia, las clases se interrumpieron en marzo y no se reanudaron hasta septiembre y se practicaron 73 actuaciones.

«El incremento es una tendencia que se mantiene», ha manifestado Covas. Preguntado por los municipios en los que requieren más sus intervenciones, ha respondido que se trata de los que tienen más población y explica que no hay diferencias entre los centros públicos, privados o concertados. De este modo, el acoso escolar no está vinculado a la clase social de los alumnos . Aunque puede darse a cualquier edad y cada vez ocurre antes, la franja más habitual son los 13-14 años. No acostumbraba a haber diferencias entre sexos, pero últimamente se están dando más entre las chicas.

Respecto al perfil de los alumnos que lo sufren, el coordinador programa Policía Tutor ha explicado que hasta hace unos años solían ser estudiantes más reservados o que sacaban mejores notas. Sin embargo, ahora también lo están padeciendo algunos que tienen el rol de líder. Por su parte, es habitual que los acosadores tengan problemas familiares, que en algún momento de sus vidas hayan sido víctimas o que tengan una autoestima baja. Además, no suelen actuar solos, ya que «siempre hay un cabecilla que tiene seguidores».

El trabajo de estos agentes es muy complicado, ya que las víctimas no suelen pedir ayuda. Por lo general, son los padres o los profesores los que detectan los problemas. Algunos de los síntomas son un empeoramiento del rendimiento educativo y cambios de conducta. Por ello, ha solicitado a los alumnos que observen prácticas de acoso que las denuncien, son los denominados «espectadores». Covas ha señalado que cuando acuden a los colegios a impartir charlas de prevención detectan algunos casos, por el impacto que generan sus palabras en las víctimas. Durante el curso 2021-22 los Policías Tutores de Baleares realizaron 810 sesiones para prevenir el acoso escolar y el ciberacoso, llegando a un total de 18.100 alumnos.

Protocolo de actuación

Una vez que se detecta un posible caso de acoso escolar se pone en marcha el protocolo de actuación. Lo primero que hace el Policía Tutor es acudir al colegio para explicar lo sucedido y activar los mecanismos habilitados. Cuando se confirma que es acoso, comienza el trabajo con los familiares para ponerle fin al problema, interactuando especialmente con la familia del acosador. Además, se pone en conocimiento de la Fiscalía del Menor y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

El coordinador programa Policía Tutor ha expresado que la primera toma de contacto suele ser muy efectiva, ya que impresiona la presencia de los agentes. Por tanto, en la mayoría de los casos se suele resolver. De ahí la importancia de detectarlos lo antes posible para evitar un mayor sufrimiento a la víctima.