Las aerolíneas quieren evitar los problemas del pasado verano, cuando hubo aviones fuera de servicio por averías y mantenimiento.

Las aerolíneas europeas que operan con Baleares se han visto obligadas en el último mes y medio a fletar cerca de 100 aviones de refuerzo para no tener problemas durante este verano en los aeropuertos de las Islas y en el resto de destinos turísticos del Mediterráneo en los que operan, entre ellos los griegos, italianos, turcos, egipcios, tunecinos e italianos.

«La situación se ha complicado por problemas de calendario en el mantenimiento de aviones, así como por el incremento de averías técnicas. Para no tener que cancelar vuelos ante la gran demanda de reservas desde todos los mercados emisores, la respuesta empresarial ha sido la de fletar aviones de refuerzo y tenerlos operativos en cuanto se necesiten. Para ello, se ha tenido que echar mano de aviones de todas las gamas de Airbus y la Boeing», indicaron representantes de touroperadores alemanes y británicos.

Las aerolíneas que han adoptado esta decisión estratégica son, entre otras, Air France, Jet2, Lufthansa, TUI Fly, Eurowings, British Airways y Transavia, filial de Air France. Transavia, por este motivo, ha sido noticia esta semana al anunciar la cancelación de 300 vuelos para verano por falta de aviones y problemas de mantenimiento, lo que ha afectado a Mallorca, al igual que otros destinos competidores de las Islas.

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El principal problema radica en que con la pandemia y las huelgas que hubo el pasado año en los aeropuertos, así como en las compañías aéreas, touroperadores y grupos aéreos quieren garantizar la programación de sus vuelos.

Verano complicado

Los touroperadores alemanes y británicos ya adelantan que el incremento de las reservas de vuelos hacia Balears y resto de destinos mediterráneos están superando todas las previsiones, «por lo que prevemos una temporada de verano muy complicada en materia aeroportuaria, pero hay que garantizar el transporte con los aviones de refuerzo».

Esta situación preocupa al sector hotelero, ya que las ventas de reservas de último momento (last minute) «van a ser la tónica general y marcar toda la comercialización durante todos los meses de verano». Las previsiones, de momento son buenas para las Islas, pero hay muchas incertidumbres.