La torre de es Savinar, situada frente a es Vedrà, es una de las cinco que maniene la titularidad privada, según la sentencia de un juzgado de Palma. Foto: VICENÇ FENOLLOSA.

Las torres de defensa denominadas de sa Sal Rossa (o des Carregador), de ses Portes, de Xarraca, d'en Rovira y des Savinar, todas ellas en la isla de Eivissa, no pertenecen al Estado. Así lo indica la sentencia emitida por la Sección A del Juzgado número dos de Primera Instancia de Palma de Mallorca. De este modo, las torres son propiedad, respectivamente, de Fomento del Turismo Ibicenco S.A., Ibifor S.A., Xavier Cabau Ibáñez, hermanos Montojo Alonso y Francisca Ribas Marí.

Por otra parte, la sentencia sí declara como patrimonio del Estado las torres de defensa de Campanitx y de Balansat, en la isla de Eivissa, y las de sa Torreta y de s'Espardell, ubicadas en los islotes de s'Espalmador y de s'Espardell. Asimismo, el Estado también tiene potestad sobre aquellas torres que son de titularidad pública sobre las que, según el auto, «ha de reconocerse el derecho en favor del Estado a recobrar la posesión de las mismas y al vencimiento de cualquier resistencia que obstaculice o sea susceptible de obstaculizar su dominio y posesión».

El abogado demandante basó su reclamación sobre estas construcciones defensivas basándose en el hecho de que éstas pertenecen al Estado «por haber estado destinadas desde muy antiguo y desde su construcción -entre los siglos XVI y XVII- a la defensa del Territorio Nacional» y en base a la Real Orden de 15 de febrero de 1867 por la que el Ministerio de la Guerra las devolvió al Estado. El abogado, además, defendió su posición al alegar que, al haber vuelto a ser usadas durante la Guerra Civil y no haber tenido lugar el acto de desafectación y la recepción de las mismas por parte del Ministerio de Hacienda, éstas no podían ser adquiridas por particulares.