AGENCIAS-LOS ANGELES
El músico mexicano Carlos Santana confirmó su reconciliación con la industria discográfica y el reconocimiento del gran público al obtener esta madrugada nueve galardones en la gala de los premios Grammy celebrada en el Staples Center de Los Angeles. El guitarrista obtuvo, entre otros, el premio al mejor álbum de la temporada, «Supernatural», y a la mejor canción, «Smooth», interpretada junto al vocalista del grupo británico Match Box Twenty.

«Supernatural», que lleva ya unas once millones de copias vendidas en todo el mundo desde su lanzamiento el pasado verano, fue también elegido mejor álbum de rock por los 10.000 miembros de la Academia con derecon derecho a voto. El primer sencillo del disco «Smooth» se llevó tres Grammy, grabación del año, mejor colaboración pop con vocalista y canción del año.

El resto de premios Grammy que fueron a parar a manos de Santana por «Supernatural», primer disco que graba en un estudio en siete años, fueron los de: mejor interpretación instrumental pop («El Farol»), mejor interpretación instrumental rock («The Calling», a dúo con, Eric Clapton), mejor interpretación de dúo o grupo pop («María, María») y también en rock («Put Your Lights On»).

El británico Sting, proporcionó una de las mayores sorpresas de la velada al llevarse los Grammy al mejor álbum pop del año y a la mejor interpretación pop masculina por su reciente trabajo «Brand New Day», derrotando en ambos casos al ídolo puertorriqueño Ricky Martin, y en el segundo también al neoyorquino de origen boricua Marc Anthony.

Ricky Martin, que partía con cuatro nominaciones, se marchó a casa con las manos vacías. Los Grammy confirmaron el auge sin precedentes de los músicos latinos fagocitados por la industria en Estados Unidos. La norteamericana de origen ecuatoriano Christina Aguilera resultó mejor artista novel de 1999.

Las otras latinas presentes en las categorías en inglés no tuvieron tanta suerte, pues tanto Gloria Estefan como Jennifer López fueron derrotadas en la categoría de mejor grabación de música de baile, ganada por otra veterana, la actriz y cantante Cher, de 53 años, con uno de los temas más pinchados en las discotecas de todo el mundo.