Retraso y excesiva sobriedad. La gala de los Premis Ciutat de Palma 2007, que se celebró ayer por la noche en el Teatre Principal de Palma, estuvo marcada por la sencillez en la puesta en escena, por un retraso de una media hora sobre el horario previsto y por el magnífico recital de Maria del Mar Bonet y Miquel Poveda, Els treballs i el dies.
Los presentadores, Glòria Franquet y Joan Carles Palos, acompañados por la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, subían al escenario del Principal para anunciar el nombre de los ganadores de las seis modalidades de la actual edición de los galardones que concede el Ajuntament de Palma. Cinco de los cuales se quedan este año en las Islas, a excepción del Antoni Gelabert d'Arts Plàstiques, que recayó en el artista bilbaíno, Javier Pérez, con su instalación El baile de la soledad, quien valoró que se convoquen premios como éstos «que incentivan la creación entre los artistas y las ciudades se vayan haciendo con colecciones de arte contemporáneo».
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