Entre los grandes proyectos culturales en marcha en Eivissa, destacan el del nuevo edificio del Conservatori en la Avenida de España y el Museu d'Art Contemporani d'Eivissa (MACE), cuyas obras de reforma y ampliación, que comenzaron en enero de 2008, están ya en la recta final; aunque el Ayuntamiento de Vila, responsable de la institución, aún no ha concretado la fecha de su inauguración.

Además, también están en marcha otros dos proyectos culturales de envergadura: la rehabilitación del Teatro Pereira, que por fin ha entrado en fase de ejecución tras haber estado atascado un tiempo por problemas burocráticos, según apuntó el pasado verano a este periódico Pedro Matutes, portavoz de los propietarios (la familia Matutes) del emblemático edificio del barrio de la Marina, declarado BIC; y el Museu Monogràfic del Puig des Molins, cerrado desde hace más de diez años y aún pendiente de encontrar financiación para desarrollar el proyecto de museización.

«Un buen regalo de Reyes»

Lo que ya está claro respecto al Conservatori es que no va a cumplirse el deseo que hace un mes manifestó a este periódico su director, Jaime Manuel Ribas: «Creo que la inauguración es ya inminente; lo que, como regalo de Reyes, sería muy bien recibido por todos». Retraso que, al parecer, se debe en parte al trámite burocrático del final de obra y a algún problema menor respecto a los instaladores del mobiliario. Circunstancias y dificultades que la cercanía de las elecciones locales y autonómicas del próximo mes de mayo podrían ayudar a solucionar.

En cuanto al MACE, los hallazgos de restos arqueológicos de varias épocas son la causa principal del retraso que han sufrido las obras, que estaba previsto hubieran terminado ya. Restos púnicos, islámicos y otros que serán cubiertos con un cristal para que puedan ser observados desde diferentes puntos del museo, quedando así integrados en las futuras instalaciones, que contará con 1.500 m2 distribuidos en cinco niveles.