La intérprete posaba el viernes en el plató de la serie tras una sesión fotográfica promocional. | Teresa Ayuga

«Contenta, ilusionada y llena de ganas», así se encuentra estos días la actriz ibicenca Tita Planells, una de las actrices que forma parte del reparto de la serie L'anell, que se estrenó el pasado lunes en IB3, en prime time. El ritmo de rodaje le impone unas diez horas diarias de trabajo. A veces, incluso más, dependiendo de las escenas que tenga que rodar su personaje, Esther, con la que no se siente del todo identificada pese a que siempre intenta no juzgar a los personajes que le toca encarnar.

-¿Cómo surgió la posibilidad de participar en esta serie?
-Ya participé en la primera serie que produjo IB3, Vallterra, en la que era protagonista. También participé con el equipo de Nova Televisió, que participa en la producción de la serie en Llàgrima de sang, hace tres años. Decidí abandonar la serie para poder disfrutar más de mi hija con la promesa de incorporarme al próximo proyecto. Y esa posibilidad ha llegado ahora. Esperaba que contaran conmigo y así ha sido. Estoy encantada.

-¿Cuál es la trama de la serie en la que participa actualmente?
-Es un poco complicado de explicar ya que es una serie muy coral. De momento está centrada en la historia de Macià, que cuando era joven presenció la muerte de su padre. En este momento, el personaje ya adulto regresa a Mallorca tras haber trabajado en Eivissa, concretamente en el bar Can Pou. Sé que hay una simbología y una trama alrededor de un anillo que él vio el día del accidente de su padre. No sé mucho más porque la trama de mi personaje transcurre en un mundo paralelo.

-¿Cómo es Esther, el personaje que interpreta?
-Mi personaje es una mujer ibicenca, que está casada con un mallorquín. Es profesora de un instituto. La pareja se casó muy joven y tiene dos hijas. Mi personaje, por tener vacaciones en verano, pasa mucho tiempo fuera visitando a su familia. Mi marido trabaja en una inmobiliaria y lleva un ritmo de vida distinto... Es que hay cosas que yo sé, que mi personaje aún no sabe. Esto de ser actriz, a veces, es un poco esquizofrénico (risas). Mi marido se ausenta durante mucho tiempo, excusándose en el trabajo y no es que yo sea malpensada y crea que tiene un amante, es que tiene toda una vida paralela montada. No sé si acabará bien el personaje de mi marido porque, el pobre, muy bien no está.

-¿No le resulta complicado juzgar a su personaje como persona, no como actriz?
-Yo no aguantaría esta situación pero claro, ella no tiene la información que tengo yo. Pero bueno, nunca puedes decir de este agua no beberé. A veces te da rabia el personaje pero tienes que intentar pensar lo que el piensa, sentir lo que el siente y no juzgarlo. Un buen actor debe dejar atrás su persona y defender a su personaje.

-A veces debe costar...
-A mí me creaba menos conflicto hacer de mala. Pero, en este caso, que refleja un mundo machista donde la mujer sigue siendo la que más pringa, a mí me afecta a nivel personal. Me pregunto por qué no soy yo la que lleva una doble vida. Me gustaría que las cosas cambiaran un poco. Aunque las series a veces se amparan en el argumento de que reflejan la realidad yo soy de las que piensan que debería intentar reflejarse otro tipo de realidad a ver si, poco a poco, la vamos creando y abrimos un caminito. Estoy negociando con los guionistas, a ver si mi personaje se rebela y puede mostrar su lado canalla (risas).

-¿Cree que los espectadores de televisión han cambiado con la llegada de internet y ahora son demasiado impacientes para esperar una semana hasta el próximo capítulo?
-Esa puede ser la realidad de los espectadores más jóvenes pero creo que queda gran parte de público que, por falta de tiempo, prefieren ceñirse a un ritual en que cada noche está destinada a ver una serie o a salir a cenar. La tele sigue teniendo audiencia aunque, es cierto que las audiencias han cambiado mucho en los últimos años. Ahora hay más oferta. Los espectadores son los mismos pero tienen que repartirse entre más productos. Ahora con un 15% de audiencia, una serie ya es un éxito.

-¿Cuál considera que es la razón por la que no surgen más actores de la Isla?
-Será extraño que los vengan a buscar aquí si ellos no salen a buscarse la vida fuera. Quizás es injusto pero, a veces, incluso salir fuera y luchar cada día no te garantiza un trabajo. Ahora tenemos una crisis más fuerte pero, nosotros, los actores la crisis la tenemos siempre en nuestro trabajo. Te tiene que gustar mucho porque es una locura, es muy inestable.

-¿Fue una decisión difícil establecer su base en Eivissa?
-Mientras sea viable vivir en la Isla y compaginarlo con el trabajo, lo haré porque la verdad es que es un regalo que mi hija pueda crecer aquí. Para mí, que también tengo muchas épocas de parón es todo un privilegio. El peligro de estar en Eivissa es que se está tan bien que a veces corres el peligro de descolgarte del trabajo, de esa lucha. Pero bueno, todas las decisiones son reversibles y el tiempo dirá.

Apoyo a la cantera
La apuesta del canal autonómico balear por las producciones locales ha conseguido, según Tita Planells que se consolide una cantera de actores que no para de crecer. «Cuando comenzó Vallterra, yo era la única ibicenca entre todo el equipo, que era mallorquín», recuerda la actriz que añade: «Ahora, incluso hay un actor de Formentera». En este sentido, la actriz valora muy positivamente que los intérpretes de Balears tengan la posibilidad de trabajar en producciones televisivas que les permiten explorar en un lenguaje distinto al teatral, hasta ahora la única posibilidad para los actores que residían en las Islas.