Los actores Pilar Tierraseca y José Manuel Lozano, en un momento de la obra.

Pa siempre habla de unos personajes que se enfrentan al mundo de las pequeñas cosas y que son capaces de desencadenar las grandes situaciones. Con estas palabras se explica en la sinopsis el argumento de esta obra, que se representará el próximo sábado, a las 21 horas, en Can Ventosa. La compañía Teatro Attípico, que actualmente cuenta con una treintena de miembros, será la encargada de poner en escena esta pieza escrita por Sebastián Junyent. María Céspedes, al frente de la dirección de la compañía desde hace 20 años, define este nuevo proyecto como «una comedia romántica que ofrece un viaje regresivo desde la actualidad hasta los años treinta».

-La obra propone un viaje en el tiempo muy particular.
-Los personajes viajan a través de sus recuerdos en esa buhardilla de Madrid, por una vida plagada de renuncias, sinsabores, amores, de soledades, de desilusiones, vivencias y desengaños en un Madrid no muy lejano. Ginés, Teodoro y Lola son los personajes que van narrando la obra a través de sus vidas.

-¿Cuáles son los temas que trata el texto de Junyent?
-La pieza desarrolla diferentes estereotipos como la vejez, la juventud, el amor, la guerra y, todos ellos, envueltos con dulzura en el registro del humor. El autor simplemente deja patente que hubo unas personas que estuvieron allí y que vivieron esos estereotipos de una manera muy diferente, pese a que es una parte negra de la historia. El autor respeta el dolor de los personajes, sin ahondar en él. Así, el público puede contribuir en la obra con su propia valoración. Con el humor, el público se lo pasa muy bien y se ríe de la propia vida.


-¿Cómo valora el resultado del trabajo realizado con ‘Pa siempre'?
-Hemos querido lograr un buen resultado final para que cada elemento de la puesta en escena resulte creíble, que sea fiel al texto y que el montaje sea equilibrado. En ese sentido estoy muy satisfecha porque no hay que dejar de pensar que somos un grupo amateur. La gente trabaja y, en sus ratitos libres, hacen lo que más les gusta, que es interpretar, contar una historia para que el público, durante un rato pueda trasladarse a la realidad que se cuenta en la función.

-¿Cómo les ha recibido el público en las anteriores representaciones de este montaje?
-Ya la habíamos presentado en Santa Eulària y la acogida fue muy buena. El público nos felicitó y eso ya cumple el objetivo con el que nace cada nuevo proyecto, que es hacérselo pasar bien al público. Siempre queremos ir a más pero está claro que los actores se vuelcan plenamente en sus papeles.

Veinte años sobre los escenarios
Teatro Attípico se fundó hace 20 años en Santa Eulària. Su local de ensayo original, que aún mantienen un día a la semana, fue el colegio del municipio. Ahora, un local municipal en la calle Sant Jaume sirve de local de ensayo para los miembros adultos. Pese a que fue un grupo que empezó con alumnos infantiles y juveniles, pronto evolucionó hacia un grupo en el que también tenían cabida los adultos. La compañía ha tenido la oportunidad de actuar en diferentes lugares y festivales del archipiélago. En estos momentos, la compañía prepara la obra de Shakespeare El sueño de una noche de verano. «Vamos a mezclar elementos modernos y clásicos», asegura Céspedes.