Adrián Cardona y David Muñoz, a ambos lados de la cámara, durante el rodaje del cortometraje ‘Fist of Jesus’.

Esta historia podría contarse como si de una película se tratara. La narración diría algo como que los cortometrajes de género fantástico y de terror de toda Europa se reunían alrededor de cinco festivales a lo largo del año para hacerse con un reconocimiento de plata gracias al que podrían conseguir alzarse sobre todos los demás como el cortometraje de oro, el mejor de los mejores. A grandes trazos es la situación en la que se encuentra Fist of Jesus, el cortometraje dirigido por Adrián Cardona y David Muñoz, que acaba de conseguir en el Abertoir Festival de Gales el Méliès d’Argent, su pasaporte plateado para competir el próximo año por el Méliès de Oro en el Festival de Sitges, una cita en la que se encontrarán los cinco mejores cortos del año.

Se da la circunstancia de que en Gales, el Méliès de Plata lo escoge el público, un hecho que es muy del agrado de Cardona. «Siempre es de agradecer que el premio no lo concedan tres personas en un jurado, sino el público la que le gusta el género fantástico y pasárselo bien en el cine. Al final, lo que nos interesa es que guste al público y no a tres o cuatro», explicó ayer a este periódico.

Cardona y Muñoz no son unos novatos en la lucha por el Méliès de Oro, un galardón al que ya optaron gracias a Brutal Relax, aunque en aquella ocasión el Méliès de Plata lo obtuvieron en el festival suizo de Neuchâtel. Sobre el recién obtenido premio en Gales, Cardona no está seguro de afirmar si es el que más les satisface, aunque sí es «el más importante» del casi medio centenar que Fist of Jesus acumula en su exitosa carrera nacional e internacional, a la que aún le quedan varias etapas que podrían engrosar un poco más la cuenta.